"Amo a mis hijas pero detesto ser madre": las palabras de esta mujer encienden el debate

Ser madres es una de las satisfacciones más grandes que tendrá en toda su vida una mujer que siempre ha querido traer hijos al mundo; sobre todo en los primeros meses y años, el trabajo de la maternidad ciertamente no es fácil, y por este motivo muchas mujeres todavía tienen vergüenza en abrirse y contar cómo se sienten dentro de ellas que algo no está bien, algo que la sociedad de hoy parece no comprender del todo: muchas madres aman con locura a sus hijos, pero odian ser madres...
via UOL
Ser madres de uno o más hijos puede ser un "trabajo" realmente duro, y no es para nada seguro que una mujer deba afrontar esta carga de responsabilidad con pasión, abnegación y entusiasmo: se pueden amar a los hijos de manera genuina y profunda pero sin estar hecha para ser madre. Sabe algo de esto Samare Felippo, una actriz brasileña que contó su experiencia como madre; lástima que sus palabras hayan suscitado una montaña de polémicas...
Samara Felippo se casó con un jugador de básquet y con él tuvo dos hijas: Alicia de 12 años y Lara de 7 años; ahora, esta mujer está separada de su anterior marido y desde el 2014 tuvo que criar a sus dos hijas ella sola.
Las palabras de Samara fueron bastante concisas: "Amo a mis hijas, pero detesto ser madre." Una afirmación que ha suscitado mucha polémica y que muchos definitivamente han malinterpretado; en pocas palabras, según las palabras de la actriz brasileña, son muchas las mujeres que afrontan a diario el gran desafío de ser madres, de no lograr encajar a la perfección en el rol que la naturaleza y que la sociedad les ha encomendado. Pero más allá de esto, Samara Felippo aclaró que no porque no le gusta este papel maternal deja de amar a sus hijas, todo lo contrario.
A juzgar por las fotos publicadas en su perfil de Instagram, esta mujer ama verdaderamente mucho a sus dos espléndidas hijas, pero ciertamente esto no significa que todas las madres de este mundo estén hechas para hacer este "trabajo" que la naturaleza les ha dado: la sociedad en la que hoy vivimos confunde muchas veces el deseo de tener hijos con el trabajo agotador y muy exigente de ser madres. Las palabras de Samare Felippo, a pesar de que no fueron recibidas con mucho entusiasmo, subrayan precisamente esto: ¡no es necesario adorar el rol de madres para amar a los hijos!
¿Ustedes qué idea se hicieron sobre este argumento?