Este joven apasionado de montañismo recicla las cuerdas deshilachadas y las convierte en correas para perros
A veces las ideas geniales nacen cuando menos lo esperamos, nos vienen a buscar en los momentos más extraños y se iluminan como lámparas en nuestra cabeza cuando ni siquiera lo estábamos pensando. Un ejemplo llamativo es el de Alexander Tsao, un sencillo joven de 16 años que, durante una de sus habituales encuentros de alpinismo sobre roca en su gimnasio, se detuvo a mirar la cuerda que lo sostenía y se preguntó que hubiera podido hacer con aquellas que, una vez deshilachadas, no se podían utilizar más.
Después de haber averiguado en varios gimnasios que las cuerdas, una vez deshilachadas y consumidas, se tiraban, Alexander estaba decidido a encontrar una solución para volverlas útiles. Dejándose inspirar por su perra Jinger, el joven de 16 años decidió combinar negocios con placer y tuvo una brillante idea: transformar las cuerdas deshilachadas en correas para perros. De esta manera, no solamente las cuerdas se reciclarían, sino que podían ser útiles también para los animales de los refugios ubicados junto a su casa, en Redmon, en el estado de Washington.
Con la ayuda de los gimnasios que se adhirieron a su iniciativa, Alexander comenzó a juntar las cuerdas y creó las primeras correas hechas a mano con sus ahorros. Luego, las puso a la venta en un sitio web creado especialmente por él para su proyecto.
Las ganancias de las ventas se donaron a refugios para animales y a las organizaciones benéficas. En el lapso de dos años, Alexander logró vender 800 correas, donando más de 30 mil dólares a todos los entes de su lista. Hoy en día, este hermoso proyecto es una organización sin fines de lucro, fundada con el nombre Rocks2Dogs.
Lo que mayormente incita Alexander es su gran pasión por el mundo de los animales: "Apoyar a los animales es significativo para mi y eso es lo que me motiva realmente. Cuando las personas compran nuestras correas están muy felices, no solamente por recibir un producto de calidad para su mascota, sino también en contribuir refugios para animales y al medio ambiente."
Además de vender correas, Alexander amplió su proyecto y creó una línea de sudaderas y remeras, en las cuales está estampado el logo Rocks2Dogs, pero no tiene la intención de detenerse: quiere expandir su marca incluyendo otros productos para animales, como arneses y ropa.
Además de hacer el bien a los animales, Alexander logró unir a muchas personas que creen firmemente en su proyecto y que lo están ayudando: "Reunir a varios grupos de personas para apoyar una causa en común puede tener un enorme impacto".
Quienes dicen que los jóvenes de hoy no piensan en las cosas que realmente importan en la vida, leyendo esta historia debería cambiar de opinión.