Deja a su novio en África para adoptar a un niño que había conocido 6 años atrás en un orfanato
Las cosas más hermosas de la vida, aquellas capaces de cambiarlas para siempre en sentido positivo, son también las más inesperadas. Algo que sabe perfectamente la joven protagonista de esta emocionante historia de adopción. Emilie Larter, una joven de 23 años del Reino Unido, se había mudado como voluntaria a Uganda para encontrarle un sentido a su vida en un momento de una gran crisis personal; quería entender quién era realmente ella y cual era su propósito en esta Tierra, pero no tenía idea que un encuentro con un niño huérfano le iluminaría la vida...
via The Sun UK
Cuando en Uganda estaba haciendo su trabajo de servicio social en un orfanato, Emelie conoció a Adam, un niño cuya madre había fallecido y al que le faltaba una familia que cuidara de él; obviamente, la mujer británica fue literalmente conquistada por el pequeño, y desde entonces nunca dejó de pensar en él: "Cuando solo era una niña, sabía que sería muy difícil decirle adiós a una persona, pero no había pensado en adoptarlo inicialmente, ¡simplemente no lo vi como una posibilidad!"
Entonces, cuando en el 2015 Emilie regresó al Reino Unido para enseñar, intentó ahorrar su salario para poder regresar algún día a Uganda y poder adoptar al pequeño Adam; cuando lo logró, seis años después, pudo encontrar trabajo en el país africano como profesora internacional de idiomas, así pudo nuevamente encontrarse con Adam, que mientras tanto había crecido en el orfanato, así es como conoció a Josh, un guardia de seguridad de 33 años que se convirtió en su pareja.
Cuando la mujer comenzó el largo proceso para la adopción de Adam, no se había dado cuenta de cuánto la burocracia internacional parecía poner un palo entre las ruedas a Emilie; después de unos cuatro años y medio y una campaña de fondos para intentar cubrir todos los gastos necesiarios del proceso de adopción, Adam finalmente logró obtener una visa y un pasaporte para volar hacia el Reino Unido junto a su nueva madre, ¡Emilie Larter!
En noviembre del 2020, en plena pandemia global causada por la propagación del Covid-19, el proceso para llevar a Adam de Uganda a la nación británica ha sido más largo y problemático de lo habitual, pasaron meses antes que Emilie (que mientras tanto estaba varada en el Reino Unido debido a las restricciones y no podía regresar a Uganda) pudiera abrazar nuevamente físicamente a su hijo adoptivo.
Pero todo lo bueno siempre termina bien: ahora, Adam y Emilie viven ambos en territorio británico, son una familia extraordinaria y muy feliz, aunque la mujer ahora tiene mucha tristeza: su compañero de vida Josh no pudo aún viajar en un avión y llegar hasta ellos.
¡Pero nosotros esperamos que esta familia pueda abrazarse nuevamente lo más pronto posible!