Bromas de la genética: en esta tribu de indonesia casi todos tienen hermosos ojos azules
Tener los ojos azules es muchas veces un orgullo en el mundo occidental, ya que es sinónimo de rareza y de belleza. No siempre, lamentablemente, la diversidad es apreciada al máximo en las demás culturas y hay quienes, por ejemplo en África, deben defenderse de las discriminaciones causadas por alguna mutación genética. Sin embargo, el fotógrafo Korchnoi Pasaribu, que se encontraba en a isla de Bután, en Indonesia, supo apreciar, y hasta capturar en película, la sorprendente peculiaridad de una tribu indígena: casi todos han nacido con los ojos azules. Sus fotos, que se pueden visitar en su página de Instagram, muestran todo el encanto de esta población afectada por el Síndrome de Waardenburg, una condición que provoca una anomalía de la pigmentación de los ojos, pero también del cabello y de la piel.
via Dailymail
Korchnoi Pasaribu, un hombre de 38 años y padre de dos hijos, en realidad, emprendió la carrera de fotógrafo por hobby, ya que se ocupa a tiempo completo en la extracción de níquel, como geólogo. El fotógrafo, procedente de Yakarta, durante una visita a la isla de Butón, se encontró con una tribu indígena caracterizada por una peculiaridad realmente fascinante e insólita para esos lugares, que son los ojos azules.
Se sabe que, quienes tienen los ojos azules, generalmente tiene la piel y el cabello claro, mientras que para esta población es absolutamente lo contrario. Esto es debido al síndrome de Waardenburg, una condición genética que afecta a 1 persona en 42.000. Korchnoi logró documentar inteligentemente la vida rural de esta espléndida tribu, inmortalizando también la belleza de los ojos. A menudo, esta condición genética está acompañada también de diversos grados de sordera y de otros defectos menores que influyen en la pigmentación del cabello y de la piel, además de los ojos.
Por lo que describe el fotógrafo, parece que los habitantes de la isla de Butón con esta característica física no se quejan de problemas oculares u otras molestias, sino de un poco de lagrimeo después de una larga exposición al sol.
Sus fotos son absolutamente profesionales y superan con creces las tomas de tomas amateur de muchos aspirantes a fotógrafos. No sorprende, de hecho, que en su perfil tenga más de 70mil personas que lo siguen.
El fotógrafo admite estar particularmente fascinado de los ojos azules, tan poco frecuentes en algunas partes del mundo, y haber encontrado en esta tribu indígena una verdadera fuente de inspiración.
Fotos en las que se trasluce toda la emoción que siente de los sujetos fotografiados
Si se han quedado fascinados por esta hermosa tribu, no podemos evitar aconsejarles a que sigan la página fotográfica de Korchnoi.