Una abuela pobre construye casas de cartón a cambio de comida: hace de todo para poder sobrevivir
Cuando la vida nos pone a dura prueba, no tenemos otra elección si no es la de reinventarnos para resolver nuestros problemas. Algunos de nosotros difícilmente logran encontrar una solución eficaz, otros, en cambio, lo logran brillantemente, aplicando simplemente una pizca de inventiva. Un ejemplo llamativo es Guadalupe, una abuela mexicana que, no teniendo trabajo, ni otra fuente de ingreso, aprovechó sus habilidades manuales para sobrevivir de manera honesta.
via Tere Vela
Esta tierna abuelita se hizo viral en Twitter gracias a la bondad del usuario Tere Vela, que compartió una foto suya junto a las graciosas casitas de cartón con bordes coloridos, realizadas completamente y detalladamente a mano. A cambio de sus casitas, la mujer aceptaba cualquier cosa que le permitiera sobrevivir: desde dinero a comida o hasta productos de cualquier tipo para ella y para la casa. Pegado a la mesa en donde estaban colocadas las casitas, había un cartel que decía: "Las cambiaré por comida o por cualquier cosa que puedas ofrecerme. Gracias".
La usuaria de Twitter pensaba que, para ayudar a la abuela, no eran suficientes exclusivamente los transeúntes que pasaban por la calle. Como consecuencia, se movilizó para que la mayor cantidad de personas posibles compartieran su publicación, invitando a cada una de ellas a ser adultos mejores; también porque, en el fondo, esta abuela desafortunada no era más que una persona víctima de circunstancias no deseadas.
En la publicación, Tere Vela divulgó todas las informaciones necesarias para encontrar a la mujer y a sus casitas, nombrando la posición exacta y todos los edificios que se encontraban a su alrededor, para que el lugar pudiera ser inmediatamente identificado y alcanzado.
Los usuarios que conocieron esta triste historia se encargaron de divulgarla también en otras redes sociales, para que tenga alcance a más personas. Gracias a la unión de varias plataformas, la mujer fue ayudada también económicamente: algunos le donaron dinero sin pedirle ninguna casita a cambio, otros, en cambio, la encontraron y le donaron todo lo que podían donarle.
Hay muchas historias de vida real que nos han ayudado a demostrar que la unión no es simplemente un valor importante, sino es sobre todo un medio gracias al cual la vida puede volverse armoniosa y satisfactoria para todos, también y sobre todo para las personas que, como esta abuela, necesitan más que cualquier otra persona.
