Con 4 años los deja a todos sin palabras: su coeficiente intelectual es casi comparable con el de Albert Einstein
Los examinadores no podían creer lo que veían. Lawson Lundberg es un niño de tan sólo cuatro años que, sometido a pruebas de coeficiente intelectual, alcanzó un puntaje ligeramente inferior al obtenido por el físico Einstein. Dada su joven edad, los expertos literalmente se quedaron si preguntas una vez que todas las demás fueron respondidas correctamente. El niño, en cambio, ni siquiera parecía cansado de las pruebas que tuvo que afrontar, dejando a todos con la boca abierta...
via Inspodaily
Se les llama "niños superdotados" y son esos pequeños que, en comparación con sus compañeros, muestran una habilidad sorprendente en un determinado momento. Son niños que con tres años pueden leer correctamente y tocar algún instrumento o hasta incluso hablar varios idiomas con fluidez porque son capaces de memorizar un gran número de palabras. Puede sorprender, pero se trata de un fenómeno bastante extendido que afecta al 5% de la población infantil.
Un fenómeno que no siempre es bien vivido por los pequeños y que tiene sus problemas: estos niños de hecho necesitan un plan de estudios adaptado a sus capacidades de manera que no se aburran y que puedan estar estimulados de manera correcta. Es el caso de Lawson Lundberg, un niño de sólo 4 años que asombró primero a sus padres, luego a sus maestros y pedagogos por sus capacidades de memorización y razonamiento.
Lawson tiene una hermana gemela, Gwendaline, y ambos nacieron prematuros. Durante varias semanas estuvieron alojados en la unidad intensiva prenatal del hospital donde nacieron. Tras este suceso, los doctores habían pronosticado un posible retraso intelectual para los dos recién nacidos. Un pronóstico realmente erróneo, a pesar de que, los primeros dos años, Lawson parecía efectivamente crecer más lentamente con respecto a los demás niños y hasta incluso, su hermana pequeña.
Sin embargo, durante este último año, la familia Lundberg se vio obligada a quedarse en su casa durante algún tiempo debido a una violenta tormenta. Durante esta clausura forzada, los padres estuvieron más cerca de los niños y los observaron con mayor atención. Se dieron cuenta que Lawson tenía una gran habilidad para recordar todos los nombres de los países vinculándolos con su bandera. Así que siguieron comprobando las capacidades de Lawson en varias materias como matemática e idioma extranjero.
Las respuestas del niño eran tan sorprendentes que convencieron a mamá y papá Lundberg a que el pequeño hiciera el test de coeficiente intelectual. "Cuando vi los resultados no podía creerlo", dijo la señora Lawson "el resultado del puntaje era 151, un número extraordinario porque no es lejano del resultado de Albert Einstein que llegó a 160 (¡y no a los cuatro años!)".
En resumen, ¡probablemente escucharemos hablar más de este pequeño genio!
