Enfermera usa sus días libres para lavar y arreglar el cabello de los pacientes ingresados en su hospital
Quienes trabajan como enfermeras tienen un talento natural no solamente por la medicina y por la asistencia médica de la persona, sino también por la empatía y la amabilidad hacia quienes más lo necesitan. Esto significa que quienes hacen este trabajo tienen una predisposición en darle una mano a los menos afortunados, precisamente como Brooke Johns, esta trabajadora de la salud que hizo que se hablara mucho de ella cuando decidió que usaría sus días de descanso para implementar un gesto de gran solidaridad...
via KTNV
Ella se llama Brooke Johns, vive y trabaja en Las Vegas como enfermera y dio la vuelta al mundo gracias a las fotografías que la ven como protagonista mientras intenta arreglar, peinar y cortar el cabello de los pacientes de la sala de emergencia que momentáneamente son incapaces de cuidar de su cabello. Brooke contó su experiencia, que comenzó cuando decidió cuidar de una amiga suya que había ingresado en el hospital donde trabajaba: "Su cabello estaba muy enredado, estaba demasiado débil para peinarse sola, y era algo que le preocupaba. Entonces, una de las veces en la que estuve en su habitación del hospital, pude cepillarle el cabello, trenzarlo y hablar con ella. Cuando dejé la habitación del hospital, ya no era la persona de antes..."
Lo que inicalmente nació como un gesto de ternura y amabilidad hacia su querida amiga hospitalizada, se convirtió con el tiempo en algo más grande: cuando Brooke tenía su día libre, se dirigía al hospital donde trabaja para cuidar del cabello de los pacientes que no podían peinárselo, lavarlo o cortarlo.
Un lavado de cabello apropiado o un corte nuevo puede de hecho cambiar notablemente el humor del paciente que se encuentra hospitalizado, y cambiarlo obviamente para mejor: "Los enfermeros, en general, entran en las habitaciones de este hospital para ayudar a las demás personas. Hay algo terapéutico en el contacto humano. Hablar entre seres humanos, tener un contacto físico con ellos, es la conexión con la que fuimos todos programados desde cuando nacimos."
Ahora, el gran gesto de empatía y amabilidad de Brooke Johns se difundió en todo el hospital donde trabaja y ahora también muchas de sus compañeros y compañeras han decidido seguir sus pasos y ayudar a los pacientes que más necesiten cuidando de sus cabellos en sus horas libres. Un gesto aparentemente banal, pero que para quien está hospitalizado, significa realmente mucho.
¡Gracias por todo lo que hiciste y sigues haciendo Brooke!
