Una perrita encuentra a un hombre ciego que resbaló por el suelo: gracias a sus ladridos le salvó la vida
Nuestros amigos animales tienen mucho que enseñarnos a los seres humanos; no solamente son verdaderos campeones de amor incondicional y afecto, sino que pueden también regalarnos valiosas lecciones de vida. Como hizo esta perrita de 11 años, protagonista de una historia de rescate que asombró incluso a su dueña desde hace mucho tiempo, Mary Violante; la mujer no podía imaginar que su Gracie sería capaz de salvar la vida de un anciano gracias a sus ladridos constantes...
via WRAL
La superheroína de cuatro patas de esta historia con final feliz se llama Gracie, tiene 11 años y es una perra de raza mixta, un perro que nació del cruce entre un Chihuahua y un perro salchicha; generalmente, Gracie se comportaba de manera bastante normal, precisamente como cualquier perro de su raza, amaba jugar, correr, estar en compañía de su humana preferida...y le encantaba ladrar constantemente. Por este motivo Mary Violante incialmente no había prestado atención a las quejas de su perra de 11 años ese día en la zona residencial de Wake Forest, Carolina del Norte.
Pero esa tarde, parecía que Gracie no podía dejar de ladrar, había algo verdaderamente extraño en sus quejas, como si quisiera llamar la atención de alguien sobre un peligro; y así, atraída por su perro, Mary notó que su vecino John Ball estaba tirado en el suelo y no podía levantarse.
El hombre de 92 años, ciego y con problemas de movilidad, había resbalado frente a su patio después de haber perdido el equilibrió y se había quedado allí, esperando que alguien lo ayudara a levantarse. Afortunadamente, Mary Violante vio toda la escena, atraída por los ladridos de Gracie, llamó inmediatamente al 911 y se aseguró que el hombre pudiera ser rescatado de la mejor manera posible. Por suerte John Ball no sufrió ninguna consecuencia seria en la caída.
El hombre de 92 años, apenas supo que había sido la perra Gracie quién le avisó a la dueña de su estado, no pudo evitar escribirle una carta de agradecimiento a Mary y a su salvadora de cuatro patas, si no hubiera sido por la perra, quién sabe cuánto tiempo hubiera permanecido tirado allí, antes de que alguien se diera cuenta: "Querida Gracie, gracias por todo lo que has hecho ayer advirtiéndoles a los humanos que yo estaba en una situación de necesidad: ¡eres mi heroína! Lassie estaría orgullosa de ti. Acabas de recibir el premio al buen vecino. Me siento honrado de ser tu amigo. Ven a visitarme alguna vez y por favor: ¡Sigue ladrando, Gracie! Tu amigo, John Ball."
Gracias por todo lo que has hecho para salvarle la vida a este anciano en problemas, pequeña Gracie: ¡Fuiste una verdadera heroína!
