Una cárcel abandonada fue transformada en un hotel lujoso: se duerme en las celdas de los detenidos
¿Se puede recuperar la estructura de una cárcel, lugar de sufrimiento y penitencia, para transformarla en algo hermoso, útil y relajante? Aparentemente sí, ¡a pesar de que se necesitan millones de esterlinas para hacerlo! La vieja prisión de Bodmin, construida en 1802 en el borde del páramo de la ciudad de Cornualles, siempre ha sido uno de los lugares más espeluznantes de Inglaterra. A decir la verdad, la prisión conoció su lento declive ya a partir de 1916, cuando el último prisionero abandonó la estructura y en 1927 oficialmente era un lugar abandonado. En la prisión de Bodmin han circulado historias de misterios y, naturalmente, de fantasmas, pero nunca nadie hubiera creído que después de tantos años la estructura se convertiría en un hotel de lujo.
via Facebook / The Bodmin Jail Hotel
La remodelación de esta importante e histórica estructura tomó 6 años y para alcanzar el resultado sorprendente de hoy, se necesitaron 50 millones de libras esterlinas. Hoy se puede alojar en la vieja prisión de Bodmin, ciertamente no como prisioneros, sino como clientes de un importante hotel de lujo. La estructura, de hecho, alberga alrededor de setenta habitaciones distribuidas en cuatro pisos, mezclando hábilmente el lujo con el ambiente misterioso y relajante al mismo tiempo.
Cada suite se compone de tres celdas originales, restauradas por expertos y utilizadas como perfectas habitaciones de hotel. Inicialmente, sin embargo, el destino de este edificio debió haber sido bien diferente: después de su abandono, se había intentado demolerlo con dinamita, pero todos los intentos fallaron estrepitosamente, ya que las paredes eran muy gruesas. Matt Cartwright, el arquitecto principal que se ocupó de transformar el edificio en un hotel, lo reinventó entonces como un lugar con un uso muy diferente al original. Y he aquí como una prisión de repente se convirtió en un sensacional hotel de lujo, ¡El Bodmin Jail Hotel!
Lo cierto es que si pones un pie en este particular hotel de 4 estrellas, no encontrarán más un viejo edificio ruinoso y abandonado, sino todo el encanto del diseño creativo y contemporáneo que se entrelaza hábilmente entre el pasado y el presente. En el proyecto, el arquitecto Cartwright transformó la capilla de la prisión en el bar-restaurante del hotel, con un piano de cola que ahora está ubicado donde los guardias de la prisión y el personal de la prisión solían sentarse para el culto, observando a los detenidos. Como se puede ver en el momento de la reserva, en los pisos superiores están disponibles las suites más grandes, con televisión y bañera.
Para husmear por el interior del hotel les sugerimos mirar las fotos de la estructura directamente en la página de Facebook del hotel o alternativamente, ¡pueden siempre reservar un fin de semana allí!
