Empuja la silla de ruedas de la madre durante toda la maratón y rompe el récord mundial
Parece imposible, pero Eric Domingo Roldán en la maratón de Barcelona corrió los canónicos 42 kilómetros en 2 horas, 53 minutos y 28 segundos, estableciendo así el nuevo récord mundial pero...¡lo hizo empujando durante todo el recorrido la silla de ruedas en la que se sentaba su madre que sufría de esclerosis múltiple! Una hazaña que se suponía que debía ser solamente una manera para recaudar fondos con el fin de investigar esta terrible enfermedad genética y que, en cambio, asumió los rasgos de una historia épica, un gesto heroico.
via Runners World
Muchos de nosotros nos quedamos sin aliento después de tres pisos por las escaleras. Imaginen, entonces, estar entrenados para poder terminar una maratón de 42 kilómetros en un tiempo inferior a las tres horas. Esto significa recorrer un kilómetro en 4 minutos y algunos segundos, de forma constante, corriendo. Si pensamos que los monopatines eléctricos no pueden superar los 20 km por hora, pueden tener una idea del esfuerzo y la velocidad que todo esto implica.
Un resultado similar en sí mismo sería extraordinario y digno de mencionar, pero para Eric Domingo Roldán no era suficiente. Por increíble que parezca, este corredor no profesional batió el récord mundial en la maratón de Barcelona empujando la silla de ruedas en la que estaba sentada su madre que sufría de esclerosis múltiple. Mamá Silvia sufre de esta enfermedad neurodegenerativa desde los 17 años que ataca y afecta al sistema nervios y que la obligó a vivir en una silla de ruedas.
Eric es un apasionado de las carreras, todos los años da la vuelta al mundo como todos los apasionados de este deporte para participar en las carreras más exigentes. Sin embargo, algunos años atrás se puso en su cabeza correr un poco como una broma empujando a su madre sobre la silla de ruedas.
Lo que inicialmente era solamente un "juego" para no dejar sola a la mujer enferma y hacer que se divierta, pronto se encendió una lamparita en la mente de este corredor amateur. ¿Por qué no convertir su esfuerzo en una especie de campaña publicitaria a favor de todas las personas afectadas por este terrible y desconocido síndrome?
Su carrera se convertiría en una herramienta para dar su colaboración a la ciencia y a la voluntad de esforzarse siempre un poco más, antes del juego, luego las carreras más cortas hasta la maratón y el Récord Mundial Guinnes, sería la manera de que el mundo conozca esta enfermedad.
Salieron frente a todos, incluso frente a los atletas de élite y corrieron los primeros 7-8 kilómetros solos, con el camino libre frente a ellos. Cuarenta y dos kilómetros y ciento noventa y cinco metros después, Eric y Silvia lo lograron. Cruzaron la línea de meta más rápido que cualquiera lo haya intentado antes: dos horas, cincuenta y tres minutos y veintiocho segundos.
Lo hicieron entre los aplausos de toda la ciudad de Barcelona, lleno de gente sobre las vallas para ver a las dos nuevas estrellas unidas por la lucha contra una enfermedad terrible y, hasta hoy, incurable.
¡Esta sí que es una historia extraordinaria!