Excluye a su novio de la compra venta de su casa y él no le habla durante 3 días
Comprar una casa no es para nada fácil, pero si al estrés ligado a la compra se agregan también cuestiones familiares, entonces, la experiencia se podría convertir en una verdadera pesadilla. Una joven de 22 años le planteó la "cuestión de la hipoteca" con el joven con el que están juntos desde hace 4 años y con el cual convive desde hace 2 años. La joven, la cual obtuvo un trabajo definitivamente bien pago, quisiera comprar una casa y establecerse en un lugar "propio". Quizás, sin embargo, las cosas no fueron aclaradas bien desde el principio dado que el joven esperaba ver también su nombre en la escritura de la compra venta. La joven explicó muy bien el contexto y el motivo de sus decisiones, pidiendo consejos a la comunidad de Reddit.
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La joven contó en detalle el contexto en el que se produjo su decisión al comprar la casa: "Mi novio (25 años) y yo estamos juntos desde hace 4 años. Hemos comenzado a vivir juntos hace 2 años en un departamento ¡y fue grandioso! Recientemente encontré un nuevo trabajo y gano unos 80.000 dólares al año, motivo por el cual quisiera que dejáramos este departamento y nos mudemos a una casa propia".
Sin embargo, aparentemente, el joven no tiene la misma dedicación al trabajo, tanto que cambió 8 en 4 años, y siempre con salarios muy bajos. Él, a diferencia de ella, no tiene depósitos con ahorros y vive al día, con el salario que tiene. Antes de pensar en comprar una casa, los dos se dividían equitativamente el alquiler, mientras para los gastos se manejaban así: él pagaba sus facturas y sus gastos, como por ejemplo los costos ligados con el auto, mientras ella se ocupaba de todo el resto, del Wifi, de la comida, del agua, de la electricidad y de todos los demás consumos. Ella siempre ha pagado más porque, objetivamente, ganaba más y eso nunca le molestó.
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En la búsqueda de una nueva casa, los dos buscaron casas con precios compatibles para permitir que la joven cubra todos los gastos de administracón y de vida soltera y al joven usar su salario como dinero extra para la pareja. El único gasto que que se mantendría inalterado sería el pago de la hipoteca en partes iguales, pero, como dijo la joven: "Costaría menos que el alquiler que pagamos ahora".
El verdadero trauma, para el joven, ha sido cuando los dos encontraron la "casa de sus sueños" y él se dio cuenta que la novia compraría exclusivamente el inmueble a nombre de ella. El joven, en ese momento, no le habló durante 3 días completos, ya que estaba convencido de que buscaban una casa para ambos. La joven intentó explicarle que vivirían juntos y que se dividirían los gastos de manera que ella pagaría más que él, el cual, al final, pagaría solamente la contraprestación por un alquiler menor al que pagaba actualmente. La joven no quiere comprar la casa también a nombre de su novio dado que aún no están casados y que nadie todavía habló de una boda. Además, la joven reiteró que para él sería como pagar un alquiler (bajo) y que luego, cuando se casen, cambiarán los acuerdos. Una decisión comprensible, influenciada también por su propia historia familiar: los padres de ella, de hecho, se separaron precisamente por cuestiones de dinero.
¿Qué piensan? ¿Hizo bien en excluir al joven de este importante gasto? ¡Escriban su opinión en los comentarios!