Renuncia con 2 semanas de preaviso, pero el jefe se venga despidiéndolo sin aviso
Tener un trabajo satisfactorio es fundamental para el propio bienestar, pero lamentablemente eso no coincide siempre con un ambiente laboral sano y sereno. Aunque si la tarea desarrollada entra entre aquellas preferidas y por la cual se ha comprometido toda la vida, el sueño del "trabajo perfecto" puede ser interrumpido muy fácilmente por los colegas o por los jefes que con su modo de ser crean un ambiente laboral tóxico, que a largo andar influye negativamente en los empleados. No hay que asombarse, entonces, si en una situación del género uno se encuentra con una oferta de trabajo mejor para poder aceptar.
En Reddit un usuario ha contado la propia experiencia en mérito y en particular, ha contado que cosa ha sucedido en el momento donde presentó la renuncia con dos semanas de preaviso. Por cuanto el episodio haya sido desagradable, ha confirmado cuanto ha estado bien en renunciar y aceptar otra posición laboral.
Renunciar implica siempre riesgos y es por esto que todos esperan siempre tener la seguridad de tener bajo la manga otra oportunidad antes de firmar la renuncia. El usuario que ha contado su experiencia en Reddit no ha sido menos y ha declarado cuales fueron los beneficios de su nuevo trabajo, contextualizando así la elección de su elección:
"Una mañana he recibido una llamada telefónica que confirmaba la fecha de inicio para un nuevo trabajo donde me habrían pagado una suma mayor y que habría reducido mi trayecto diario de 1 hora, a 15 minutos. Naturalmente estaba encantado y escribí de inmediato mi carta de renuncia. Al final de nuestro turno, después que el jefe me entregó el cheque, le di la carta y después de algunos minutos de silencio, me ha dicho: "Siento como si me estuvieras apuñalando la espalda en este momento". Me ha preguntado donde habría ido a trabajar y le respondí que "no era asunto suyo, sepa que me voy porque he recibido una mejor oferta y ese puesto ofrece ventajas reales a diferencia de aqui".
El empleador quedó evidentemente más bien sorprendido de la renuncia de su empleado, pero en vez de reaccionar de manera civil, ha llevado adelante un comportamiento más bien infantil: "Yo no tengo necesidad de tu preaviso de dos semanas, estás despedido. Entrega el teléfono del trabajo y las llaves. ¡Prepara las valijas y vete!"
¿Es posible que un empleado no sea ralmente libre de elegir cuando dejar su trabajo, incluso siguiendo las reglas internas de la oficina? El hombre, de hecho, no había hecho nada de equivocado al dar el preaviso de dos semanas, pero el empleador no ha estado en grado de comportarse a la altura correctamente. Inútil decir que desde la web llegaron cientos de apoyos al empleado, el cual no ha hecho nada de malo.
