Madre defiende su decisión de comprarle ropa barata a sus hijos mientras que ella usa ropa de marca
¿Alguna vez han visto a una madre o a un padre hojear el manual del "padre perfecto"? Seguramente no, porque el libro en cuestión no existe y nunca existirá (¡por suerte o lamentablemente!). Cada padre debe afrontarlo solo, consciente que desde el primer año de vida de su hijo, al menos hasta la edad de los dieciocho años, todo estará centrado en él. Lo que los padres no saben es que durante todo este período de tiempo serán bombardeados de constantes críticas por parte de desconocidos, o por otros padres, que creen saber mejor que todos cómo se educan a los hijos.
Caitlin Fladager, sin embargo, está cansada de recibir estas críticas y decidió "responder" en la web a quienes la acusaban de vestirse con ropa de marca y descuidar a sus hijos comprándoles ropa barata.
via Instagram / caitlinfladager
Las personas hablan de todo, especialmente con lo que respecta a la educación de los hijos. Por algún extraño motivo, padres o no, se sienten todos en el deber de juzgar y dar consejos prácticos sobre como criar a los hijos. Mientras que se trate de dar una ayuda sincera vamos muy bien, pero en todos los demás casos no. Caitlin Fladager es una madre canadiense que después de haber recibido otro comentario negativo sobre cómo vestía a sus hijos, decidió responder. Las acusasiones vertidas contra esta madre se referían al hecho que ella se vestía con ropa de marca, por lo tanto caras, mientras que sus hijos se vestían con ropa barata, comprada en el supermercado. La mujer tuvo la paciencia de responder a las críticas, sosteniendo que ella, a diferencia de sus hijos pequeños, no se mancha constantemente la ropa cada vez que come algo. Además, los niños crecen muy rápido, se sabe, ¿qué sentido tiene gastar tanto dinero por una camiseta o un pantalón que podrán usarlo solamente durante unos pocos meses?
Además, los niños pequeños siempre quieren jugar al aire libre e inevitablemente, se ensucian toda la ropa que usan; muchas madres terminan regañando a sus hijos por haberse ensuciado las bonitas camisetas apenas compradas, mientras que Caitlin dice que podrían simplemente comprar más baratas y evitar molestar a los niños solamente porque se divirtieron. "Me esfuerzo por ser la madre que los ve levantarse y dice 'oh no te preocupes, ¡no es un gran problema!. Me esfuerzo por ser la madre que los ve jugar en el piso, sin preocuparse por estar arruinando su ropa nueva", comentó Caitlin. ¿Cuál es, entonces, la verdadera enseñanza con sus hijos? Que al final del día no importa si tu ropa es de marca o no: "Lo sucio, las sonrisas y el helado me hacen mucho más feliz que una foto de ellos con ropa que en realidad odian o que será demasiada pequeña para ellos en algunas semanas".
¿Y ustedes qué piensan?