Niña de 10 años sobrevive una noche a -11°C abrazando a un perro callejero
Una vez más estamos aquí para contarles la historia de un perro que solamente gracias a su presencia logró salvar a una niña de diez años que se había perdido en una terrible tormenta de nieve. Una historia que podría haber tenido un final diferente si la ayuda no hubiera llegado a tiempo, ya que en la ciudad de Uglegorsk los grados bajan mucho, sobre todo por la noche.
Vika Z. estaba regresando de la escuela, cuando se perdió en el camino de regreso debido a una repentina tormenta de nieve que se desató frente a sus ojos. La niña, de tan solo 10 años, se encontró sola con un perro callejero, su única fuente de calor. Vika abrazó a ese perro y permaneció a la espera de ayuda durante 18 horas. ¡Un verdadero milagro que la hayan encontrado aún viva!
via Mirror
Facebook / Viktor Nikiforov / Not the actual photo
A Vika les encanta mucho los perros y en su ciudad, Uglegorsk, en el Lejano Oriente Ruso, se entretenía a menudo con ellos y les daba de comer en la calle. Nunca hubiera pensado que, un día, uno de esos perros sería su salvación. En la ciudad de Uglegorsk las temperaturas suelen estar bajo cero; cuando la pequeña Vika salió de la escuela alrededor de la una de la tarde, había un fuerte viento y afuera hacían -11°. Vika debe haberse detenido para abrazar a algunos perros en su trayecto de regreso hacia su casa y de repente, perdió el sentido de orientación. La tormenta de nieve, que luego se desencadenó, ciertamente no la ayudó a regresar sobre el camino inicial.
La niña se perdió en la tormenta, pero por suerte logró permanecer pegada a un perro callejero. Los rescatistas y voluntarios que la buscaron durante horas, la encontraron tirada sobre un colchón, de esos que los ciudadanos habían colocado para salvaguardar un poco a los perros callejeros, junto a un perro. Vika había abrazado al animal durante toda la noche y milagrosamente había logrado calentarse un poco. Cuando la llevaron al hospital, los médicos advirtieron un principio de congelamiento, pero nada que no pueda curarse.
Esta niña ha sido muy afortunada en sobrevivir a una experiencia terrible como esta y estamos seguros que los perros seguirán siendo sus mejores amigos, por el resto de su vida.
