Perro callejero "vigila" el auto robado hasta la llegada del dueño: adoptado
¿Sabían que el perro es el mejor amigo del hombre? Estamos seguros que esta manera de decir, tan difundida en cada lugar del mundo, la han oído pronunciar hasta la saciedad, sin embargo estamos bastantes seguros de que hay un gran fondo de verdad detrás de estas palabras aparentemente triviales. ¿Cuántas veces hemos leído o hemos presenciado a gestos de gran coraje y cariño por parte de nuestros amigos de cuatro patas hacia sus dueños humanos? Gestos sencillos, pero que estos ángeles peludos llevan a cabo dominados solamente por un sentimiento en común: el amor incondicional por su humano preferido.
via Caes Online
Incluso la historia que queremos contarles hoy tiene como protagonista a un perro leal y cariñoso, que inconscientemente le cambió la vida para mejor a un joven de tan solo 18 años que no estaba pasando para nada un buen momento. El joven en cuestión se llama Vitor Mangino, vive cerca de Campo Grande en Brasil y había trabajado muy duro durante los últimos tres años para poder ahorrar el dinero suficiente para comprarse un automóvil propio. Después de haber logrado el objetivo y haber coronado su primer sueño, Vitor había participado a una fiesta nocturna con otros amigos y había ido al lugar del festejo precisamente con su nuevo auto.
Lamentablemente, al final de esa velada, el auto de Vitor había desaparecido y el joven, desesperado, no sabía qué hacer; luego de tantos años de sacrificios y haber ahorrado dinero para poder comprarse uno, ahora se lo habían robado. Después de acudir a la policía local, Vitor había perdido toda esperanza, luego algunos días después llega una llamada inesperada: su automóvil había sido encontrado.
Pero quién sabe en que condiciones se encontraría, quizás sin asientos, ruedas, partes del motor, neumáticos, sin embargo estaba milagrosamente intacto; ¿único detalle increíble? Había un perro callejero que había literalmente tomado posesión del capó delantero del automóvil y no quería absolutamente irse de allí. Cuando Vitor llegó al lugar del hallazgo, a unos 18 kilómetros del lugar de la fiesta de algunos días atrás, no pudo dejar de notar que el perro callejero había vigilado su auto durante todo ese tiempo, gruñendo a quienes se atrevían a acercarse a él.
Como si entendiera que ese auto pertenecía a Vitor, el perro "reconoció" al legítimo dueño del auto, bajó del capó y se acercó al joven meneando la cola; sorprendido, Vitor sabía que no tendría el corazón para abandonar a ese extraordinario guardián de cuatro patas allí, luego de mantener su auto alejado de los problemas: "Cuando lo vi, se quedó simplemente allí, mirándome y luego se acercó moviendo la cola, como si supiera de que el auto era mío. No podía dejarlo allí solo. Al final, decidí llevármelo. Este perro cuidó a mi auto y me estaba esperando: ¿es o no es un ángel de cuatro patas?"
Pero sí que es un ángel de cuatro patas. Ahora el perro, que ha sido rebautizado como Heineken, vive bajo un techo seguro junto a un nuevo dueño y otros dos perros, Bud y Charlotte, felices de darle la bienvenida a un nuevo hermano de cuatro patas.
¡Estuviste muy bien Heineken!
