A los 121 años ha sido uno de los más longevos de la historia: la historia del hombre que ha vivido en 3 siglos diferentes
¿Quién no quisiera vivir hasta los 100 años y más? Al contrario, quisiéramos afirmar que cada ser humano, en lo más profundo de su corazón, desearía ardientemente vivir eternamente y no pasar jamás a una mejor vida. Un sueño que en definitiva nos une a la mayoría de nosotros, a pesar de que obviamente las leyes de la madre naturaleza impiden que eso suceda. Por este motivo no podemos hacer más que envidiar un poco a las personas mayores de cien años, precisamente como al protagonista de esta increíble historia verdadera que tuvo lugar en Chile hace algunos "siglos".
via TRT
Conozcan a Celino Villanueva Jaramillo, el hombre que hasta el 2018, año de su fallecimiento, había sido considerado como la persona más anciana en la historia del país sudamericano y que probablemente estaba entre las más ancianas del mundo entero, al menos hasta cuando estaba vivo. El libro Récord de los Guinness nunca pudo oficializar el récord personal de Celino porque faltaba la documentación oficial que pudiera sacar todas las dudas sobre su efectiva fecha de nacimiento. De hecho, a pesar de que Celino decía que había nacido el 25 de julio de 1896 como documento de identidad personal, nunca había obtenido tal documentación hasta 1965, solo poco después de haber cumplido los 69 años de edad.
Como dice el Servicio de Estado Civil e Identidad de Chile, "El 2 de septiembre de 1965 su nacimiento fue registrado en la comuna de Río Bueno, a pedido del titular, cumpliéndose la presentación de dos testigos frente al oficial civil de Los Lagos."
Para que el récord de Celino se haga aún más difícil de establecer estaba también para tener en cuenta cuánto el registro en el estado sudamericano seguía procedimientos muy diferentes al menos hasta 1930. Poco entonces se sabe de los años de vida de Celino antes de la registración del documento de identidad en 1965, salvo que según su cédula había nacido el 25 de julio de 1896 y que en el momento de su fallecimiento, el 17 de abril de 2018, había cumplido 121 años, haciéndolo una de las personas más ancianas del mundo jamás registradas y una de las pocas personas en haber vivido en tres siglos diferentes.
De lo que se sabe de su vida es que, tenía siete hermanos y desde pequeño había comenzado a trabajar la tierra; durante 40 años de su vida fue peón en una gran casa de campo, nunca se casó y como consecuencia nunca tuvo hijos.
¿Fue el trabajar en la tierra y la decisión de no formar una familia en hacerlo uno de los ultracentenarios más longevos que se han documentado en el mundo?
¡Le pondríamos nuestra firma si llegáramos a esa edad!
