"No trabajo las 24 horas, los 7 días de la semana": la respuesta del empleado molesto por un cliente durante los descansos
El horario de trabajo debe ser respetado, tanto de un lado como del otro: el empleado debe cumplir claramente con su contrato de las horas establecidas previamente, mientras que el empleador no debería aprovecharse de su posición para solicitarle que trabaje también fuera de esos horarios. Se trata de un equilibrio precario sobre todo para los trabajadores freelance, que al no sellar una tarjeta horaria se encuentran trabajando "a todas horas" por el cliente de turno. En realidad, se trata de una situación común también en algunas empresas y el joven Iván Nava lo atestigua con su historia. Iván denunció a través de Twitter los persistentes pedidos de un cliente fuera de su horario de trabajo. Pedidos que estaban acompañados de insultos y maltratos, frente a los cuales el joven empleado no se quedó en silencio.
Es necesario saber encontrar el compromiso adecuado entre la vida laboral y la privada, tratando de no llevar el trabajo a casa y los problemas personales al trabajo. Es cierto, no siempre todo es negro o blanco, pero por lo general un cliente no debería permitirse hablar mal de un empleado, sobre todo si las solicitudes que le envía están fuera del horario de trabajo. Un cliente llamado Francisco estaba evidentemente molestando a Iván durante un descanso, pidiéndole poder hablar con él para aclarar una cuestión laboral y abrumándolo con llamadas. Iván no respondió porque estaba en su descanso, pero cuando las palabras comenzaron a hacerse pesadas, no se quedó en silencio:
"Perdóname Francisco, pero no trabajo las 24 horas del día, los 7 días a la semana y te pido por favor que te midas con tus palabras, en algunas ocasiones hemos tenido problemas debido a tu forma de tratar a la gente".
Iván luego compartió en Twitter la captura de pantalla de los mensajes con Francisco, obteniendo un gran número de visualizaciones y de comentarios que lo apoyaban. Luego agregó que después de lo sucedido su jefe también lo apoyó en esta historia y que no lo despediría: "Hace unos momentos hablé con el socio más importante de la empresa para la cual trabajo y me dijo que tengo todo su apoyo", dijo en la publicación.
Ivan luego escribió otra declaración con respecto a la historia: "Me siento bien conmigo mismo. Sé que si no le ponía un límite a esta persona, la mala educación y los maltratos aumentarían, porque no era la primera vez que lo hacía. Nadie se lo merece".
Difícil no compartir plenamente las palabras de Iván, ¿no lo creen?