Encuentran un cachorro abandonado en el baño de un aeropuerto y una carta conmovedora: "Cuídenlo"
Estar obligados a tener que elegir entre la propia integridad y la de tu mascota es una verdadera injusticia, que nos lleva a reflexionar sobre las pésimas condiciones de vida de algunas personas. La historia de Chewy, un perrito de 3 meses abandonado por su dueña en un aeropuerto, cuenta precisamente este malestar. El perrito fue encontrado junto a una carta en la que su dueña explicaba por qué se vio obligada a realizar este gesto extremo: amaba a su perro, pero su novio lo maltrataba tanto que la mujer se vio obligada a abandonarlo con la esperanza que pudiera encontrar una mejor casa.
via Today
El pequeño Chewy fue encontrado por un empleado de seguridad en el baño del aeropuerto internacional "McCarran" de Las Vegas. El perro estaba acompañado por una carta escrita con lapicera, realmente emocionante: "¡Hola! Soy Chewy. Mi dueña tenía una relación enfermiza y no podía pagar mi boleto de avión. No quería dejarme con todo su corazón, pero no tenía otra opción. Durante una pelea, mi ex novio le dio unas patadas a mi perro, que ahora tiene un gran chichón en su cabeza. Muy probablemente necesite un veterinario. Amo a Chewy y les pido que lo amen y que cuiden de él".
La seguridad del aeropuerto llamó inmediatamente a la asociación "Connor and Millie's Dog Rescue", especializada en la recuperación de perros ancianos o de cachorros que han sufrido algún trauma. El pequeño Chewy fue puesto a salvo e inmediatamente recibió el tratamiento médico necesario. El cachorro, de tan solo 3 meses, se encontraba en un excelente estado de salud a pesar de que se presume de que pudo haber sufrido muchos traumas debido al ex novio de la dueña. La voluntaria de la asociación que se encargó de él, quiso dar a conocer al mundo de internet la historia de Chewy, sobre todo para poder llegar a los oídos de su ex dueña: "Estoy tratando de correr la voz para que sepa que está en un lugar seguro".
A pesar de los traumas sufridos, Chewy demostró ser un cachorro cariñoso, que no tiene miedo de nada, ni siquiera de los fuegos artificiales: "Se ve que es un perro que ha sido amado" afirmó la voluntaria que lo atendió.
Lamentablemente, la historia de Chewy no es un caso aislado: a menudo, aquellos que quieren tener un control enfermizo con sus parejas, toman como objetivo también a las mascotas de ellas. Es aquí, entonces, como la violencia afecta también tanto a los animales como a las personas. ¡Esperamos que no tengamos que presenciar más episodios como este!
