Niña ucraniana está muy feliz de haber encontrado una muñeca igual a la que había dejado en su casa antes de escapar
Cuando se habla de guerra, se habla en primer lugar de una gran tragedia para la humanidad: no existe un conflicto, de hecho, que pueda justificar las graves pérdidas sufridas, sobre todo entre las filas civiles. Pero además de las pérdidas, hay que considerar también el trauma de tener que abandonar el propio hogar y todo lo que hasta hace unos momentos formaba parte del día a día de todos. En el conflicto entre Rusia y Ucrania, pensamos en las miles de familias ucranianas que se vieron obligadas a hacer las valijas apresuradamente y a dejar su país. Entre estos refugiados, los más afortunados logran encontrar asilo en otros países y encontrar temporalmente un poco de paz. La pequeña Veronika y su madre, Tatiana, están entre las que llegaron al Reino Unido luego de haber escapado de su país.
Cuando escapas de la guerra no hay tiempo para pensar demasiado en qué salvar o llevarse, y lamentablemente muchos de los recuerdos personales quedan inevitablemente destruidos. Tatiana y su hija Veronika escaparon con una valija y un trolley y obviamente, la niña no tuvo tiempo de elegir sus juguetes preferidos. Una vez que llegaron a Inglaterra, fueron acogidas por una familia que estaba adherida al programa "Casas para Ucrania", una manera de ofrecer su hospitalidad y solidaridad a quienes huyen de los horrores de la guerra. Aquí, madre e hija encontraron una sonrisa por un momento. La pequeña Veronika estaba en "Stripey Stork", el banco solidario más grande del Reino Unido dedicado a los niños; aquí, se recauda ropa, juguetes y cualquier cosa necesaria para los niños de 0 a 16 años.
Una vez dentro de la bodega de la organización benéfica, madre e hija pudieron aprovechar algunos artículos necesarios entre ellos ropa, zapatos, juguetes, una silla de bebé, un protector para la cama, un orinal, pañales y artículos para el baño. Pero lo que más sorprendió ha sido la reacción de la pequeña Veronika cuando encontró una muñeca idéntica a la que, lamentablemente, había tenido que dejar en Ucrania.
La reacción de la niña fue de extrema alegría: ¡había encontrado un objeto querido y pensaba que lo había perdido para siempre! La organización benéfica "Stripey Stork" publicó la pequeña buena noticia en Twitter: "Veronika y su madre estaban muy felices cuando vieron a esta muñeca: era precisamente la misma que la pequeña había tenido que dejar en su hogar. ¡Qué dulce! Un momento de alegría y de conexión, que mejoró nuestro día, sobre todo cuando Veronika nos mandó un beso mientras se iba".
Es difícil aceptar que tantos civiles, entre ellos madres y niños, deban sufrir tales consecuencias causadas por un conflicto. Afortunadamente estos episodios de solidaridad no son solamente episodios aislados y si bien no resuelven la situación en su conjunto, son de todas formas de gran ayuda para todos aquellos que hoy se encuentran en serias dificultades.