La novia le pide a sus 4 abuelas que sean "sus damas de honor" y que arrojen pétalos cuando pase

¿A qué cosa nunca renunciarías el día de tu boda? Aparte de tu pareja, esto está claro. Probablemente otro elemento fundamental serán los seres queridos. Familiares y amigos no pueden ciertamente ausentarse en un momento tan importante en la vida de dos personas. Por eso, entonces, a menudo se elige entre algunos de ellos para cubrir uno de los roles principales dentro de la ceremonia. Ya sean testigos, damas de honor o niños de las flores, no tiene importancia, siempre y cuando estén presentes.

Exactamente el razonamiento que hizo la novia de la que estamos por hablarles. Esta joven mujer pensó precisamente en toda la organización de la boda y obviamente, a las infaltables damas de honor que esparcirían pétalos de rosas en el camino de la novia. Pero la decisión no fue para nada obvia. Veamos que se inventó.

via Dailymail

Lyndsey Raby es la protagonista de esta hermosa historia. Novia desde hace mucho con el hombre de su vida, Lyndsey y su compañero eligieron la fecha de la boda y organizaron una boda casi perfecta. Habiendo elegido a los testigos y a las damas de honor, a los dos futuros esposos no les quedaba más que pensar también en las "damas de las flores". De esto, específicamente, se encargó ella.

Generalmente cuando se piensa en esta figura, la mente va inmediatamente a jóvenes doncellas que, con un hermoso vestido blanco y una coronita de flores en la cabeza, caminan con gracia esparciendo pétalos al pasar a la novia. En este caso, se eligieron 4 personas muy, muy especiales.

"Desde cuando me comprometí y comencé a pensar en el día de mi boda, tenía un objetivo: quería a toda costa involucrar a mis abuelas y que cubran un rol especial durante mi boda. -contó Lindsey- Fui muy afortunada en tenerlas a todas allí conmigo". Así es: la futura esposa eligió como "damas de las flores" a sus dos abuelas, la abuela del novio y a su bisabuela de 90 años. Una decisión original y muy simpática sobre todo por el espíritu y la alegría con la cual participaron en la ceremonia las cuatro señoras.

Hasta incluso la fotógrafa oficial de la boda quedó gratamente sorprendida y comentó con estas palabras: "Participé a muchos eventos y vi a muchas chicas de las flores, pero estas 4 mujeres ganaron el primer premio. Cuando Lindsey me dijo de su decisión, no me esperaba ciertamente un nivel de "descaro" similar de personas para nada jóvenes. Sin embargo, - continuó Caho- Sus energías han sido increíbles. Estaban muy felices de estar al lado de su hermosa nieta y animaron la fiesta. Me di cuenta de que la edad no cuenta, sino que lo importante es sobre todo el carácter de cada persona".

Una idea original y sentida que hizo feliz en primer lugar a la novia y luego también a las 4 abuelitas. Envueltas en vestidos de encaje azul todas iguales entre sí, las especiales damas de honor desfilaron sobre el pasillo lanzando flores con la mirada llena de amor y de entusiasmo.

Tener una abuela a tu lado en un día especial como es la boda es una gran conquista, si además están las 4, entonces es casi un sueño cumplido. Felicitaciones a Lindsey por la decisión tomada y por habernos transmitido toda la alegría de ese momento a través de las fotos tomadas.