Conoce a un hombre a través de una aplicación, concretan una cita y él va en pijama
Los encuentros y las citas concertadas a través de sitios de citas están cada vez más en la agenda. Quizás entre las personas que se juntan por lo general no se logra encontrar a un alma gemela, o se busca solamente una manera para ir más allá del círculo de amigos íntimos, es un hecho que las citas a través de internet se intensificaron cada vez más. Sabe algo de esto la protagonista de esta historia que, luego de un matrimonio fallido y un divorcio, decidió inscribirse en Tinder para hablar y quizás, encontrar a alguien interesante.
Así fue, pero no todo salió como lo imaginaba y el hombre que había llamado su atención perdió muchos puntos cuando llegó a la primera cita en pijama. Sí, han leído bien, en pijama. Un buen pijama cálido de Bob Esponja, pero les contamos bien cómo fueron las cosas.
via Tik Tok/tara.relationshipcoach
Tik Tok/tara.relationshipcoach
Ella es Tara, una madre y ex maestra que, luego de un matrimonio tormentoso, decidió divertirse un poco y para probar algo de suerte, inscribirse en Tinder. La mujer nunca antes lo había hecho, pero ya que había escuchado hablar de ello bastante, cedió y comenzó a conocer personas en la web.
"Comencé a hablar con un chico y él me decía que en el portal era todo muy divertido, contó Tara, yo era nueva y me dejé llevar. Tengan en cuenta también que luego de la ruptura con mi ex no me sentía muy atractiva y en paz conmigo misma, pero ese chico me decía que era linda y yo estaba mejor. Luego - continuó la mujer - me propuso que nos encontremos y acepté".
Tik Tok/tara.relationshipcoach
Tara, ahora felizmente casada y madre, tenía disponible unos 45 minutos en ese infame día y decidió aceptar. Se lo comunicó a su interlocutor en Tinder y él, sin pensarlo demasiado, le dijo que la encontraría con gusto después del trabajo para tomar un café.
"Salí del trabajo y ya que en esos momentos era una maestra, usaba ropa muy profesional.- contó Tana - Él, sin embargo, mientras estaba en la calle, me escribe que me gustaría mucho el pijama que llevaba puesto. Yo me eché a reír creyendo que era una broma. Sin embargo, apenas lo vi en el local, quedé con la boca abierta: usaba realmente un pijama cálido de Bob Esponja y pantuflas con forma de lobo. Nunca hubiera creído, si no lo hubiera visto con mis ojos, que alguien pudiera presentarse a una primera cita con ropa de dormir. Sin embargo fue así".
Como si no fuera lo suficientemente vergonzoso, algunos instantes después entraron también 3 de sus alumnos y la vieron acompañada de ese original caballero. Tara entendió de inmediato que no tendrían ningún futuro, entonces luego del café saludó al joven diciéndole que había sido un placer conocerlo, pero que no estaba interesada en seguir adelante.
¿Cómo se lo tomó él? Para nada bien. "Si lo hubiera sabido antes no hubiera manejado nunca hasta aquí ni tampoco me hubiera puesto mis mejores pantuflas." Una paradoja que dejó estupefacta a Tana, pero que contándolo sólo puede sacar la sonrisa que se merece y lo mismo vale para nosotros los lectores.
¿Qué harían ustedes en una situación similar?
