Adolescente sin hogar roba una cartera en un bar: el dueño le ofrece ayuda en lugar de llamar a la policía
Demasiadas personas hoy en día se ven reducidas en la calle y no encuentran otra solución que robar, sólo para conseguir algo que meter debajo de los dientes. Se trata de supervivencia, pero ciertamente no podemos justificar un acto tan mezquino: robar no es la solución. El dueño de un bar, Jimmy Gilleece, se encontró teniendo frente a él una situación poco agradable luego de que una cliente perdiera su cartera en su negocio. Esa cartera contenía un recuerdo importante para la cliente y Jimmy le prometió que la recuperaría. Durante esta pequeña aventura, el dueño del bar no sólo encontró "al ladrón" de la situación, sino que también le hizo una increíble oferta para que deje de robar.
via Youtube / CBS Evening News
La cartera perdida por la señora contenía un recuerdo irremplazable y muy valioso para ella: el anillo de bodas. Jimmy quería hacer lo mejor posible para encontrar todo y devolvérsela a su cliente, entonces se puso a ver horas y horas de grabaciones tomadas por su cámara de seguridad, hasta que encontró el momento exacto en el que la mujer había perdido la cartera. La cliente la había dejado en un banco precisamente afuera de su negocio y poco después, fue tomada por un joven. Jimmy ahora sabía a quién "cazar".
Una vez localizado el chico, Jimmy descubrió que se trataba de un caso límite: el joven de diecisiete años era un vagabundo que había escapado de su familia; vivía en la calle y se las arreglaba como podía. La situación definitivamente era desesperada y él mismo admitió que vio la cartera, tomó el dinero y tiró el resto en una alcantarilla cercana.
Ese chico, River Prather, no era un criminal, era solamente una persona que necesitaba seriamente ayuda porque la sociedad y su familia le habían dado la espalda: "Vivía en los bosques, y estuvo allí afuera incluso cuando hacían 30 grados y no comió nada durante dos días. Sabía que no era un criminal. Era tan solo alguien que necesitaba una pequeña ayuda", afirmó Jimmy.
La mayoría de las personas, quizás, hubieran llamado a la policía, pero Jimmy decidió hacer algo mejor: le dio la bienvenida en su casa y le cambió la vida. Pero antes, cumplió la promesa que le hizo a su cliente y puso en acción a un equipo de buzos que registraron minuciosamente la zona en la que debía estar la cartera. Al final, la encontraron. No hace falta decir que la mujer estaba muy feliz.
No sucede todos los días leer historias con final feliz como esta y es por esto que debemos atesorarla. Ayudar a los demás es una manera para ayudarnos a nosotros mismos y estar en paz con el mundo: ¡deberíamos tratar de hacerlo con mayor frecuencia!