Perro anciano adoptado poco antes de ser sacrificado: ahora es feliz y parece sonreír lleno de gratitud
El perro es considerado el mejor amigo del hombre y no es casualidad que muchas veces sea un compañero fiel, capaz de permanecer cerca de su amo en cualquier situación. Sin embargo, hay que decir que muchos perros terminan en la calle, quizás abandonados luego de un "período de prueba" o destinados desde su nacimiento a tener una vida callejera, sin conocer nunca el amor de una familia verdadera. Esto es lo que le sucedió a Bear, un dulce perro de 11 años que parecía destinado a terminar sus días en la jaula de un refugio. Bear se había convertido en un perro triste y solitario, que ya no tenía ganas de luchar y estaba cerca de su final. Poco antes de ser sacrificado, sin embargo, sucedió el milagro...
via TikTok / madgarv
El amor que solamente una familia puede dar a un animal puede realmente revertir las situaciones más desesperadas. La historia del perro Bear es un buen ejemplo: un perro de 11 años que nunca ha conocido las caricias de un humano que se preocupara realmente por él. Deambulaba solo por las calles de Texas, tratando de sobrevivir solo, antes de ser tomado por el refugio BARC Animal Shelter. Sin embargo, desafortunadamente, a pesar de varios intentos, nadie quiso adoptar a Bear durante su período de estadía en el refugio. Para él parecía no haber esperanzas. Además, ¿quién adoptaría un perro de tamaño grande, anciano y triste?
Bear, por lo tanto, fue puesto en la lista para ser sacrificado: un final triste y horrible del cual podía ser salvado solamente por una persona decidida a adoptarlo. Desde ese momento en adelante, Bear casi parecía haberse dado cuenta de lo que estaba por suceder, porque dejaba de moverse o de esforzarse para levantarse cuando alguien pasaba cerca de la jaula.
"Es irreal que un perro como él haya llegado a la lista de la eutanasia. Su personalidad es perfecta, es un perro tranquilo y amistoso" comentó Madeline Garvis, una de las voluntarias del refugio. Y fue precisamente ella quien quiso luchar por Bear, dándole otra posibilidad. La voluntaria decidió hacer el intento de llevar a Bear afuera, al aire libre, para observar su comportamiento. Bear de repente renació: se veía que era un animal que quería estar afuera y recibir amor. Madeline, entonces, grabó la escena y publicó todo en las redes, para que todos pudieran ver la belleza de un perro "anciano" como Bear.
Gracias a esta acción, Bear recibió muchas solicitudes de adopción, hasta que encontró una casa definitiva apenas una hora antes de la cita para la eutanasia. La transformación de Bear ha sido la mayor satisfacción para la voluntaria, que quiso ehfatizar la importancia de su trabajo. Se ve claramente en el video publicado en TikTok que Bear ahora es un perro feliz.