Su esposa se enferma y los médicos le aconsejan hospitalizarla: él no la deja pero viajan a descubrir el mundo
Es muy cierto que el amor no conoce obstáculos. Cuando conocemos a una persona especial, se la ama y se le jura amor eterno, no hay problemas, enfermedad, imprevisto que depare. Si dos almas están hechas para estar juntas, no habrá montaña demasiado alta para escalar o mar demasiado tormentoso para ser navegado.
Así ha sido para los dos cónyuges de los que queremos hablarles. El sentimiento entre ellos ha sido tan fuerte que supieron hacer frente a un enorme problema de salud que surgió cuando aún eran jóvenes. Descubramos qué fue lo que sucedió.
via People
Andy y Donna se conocieron en Pawtucket y todo comenzó por una muy banal petición por parte del joven: "¿tienes una goma de mascar?". Desde ese momento no se separaron nunca más. Se comprometieron, se casaron y formaron una familia con 4 hijos. Sin embargo, luego, una noche todo cambió y un malestar obligó a Donna a quedarse en una silla de ruedas.
Todo sucedió durante las fiestas navideñas cuando ella tenía 45 años. Un dolor de cabeza la llevó a acosarse mientras los demás aún se entretenían en compañía y al día siguiente descubrió que había sido afectada por una aneurisma. Problema que le paralizó la mitad de su cuerpo y que ya no le permitía seguir con su vida de siempre. Luego de varios controles y tratamientos, los médicos se pusieron de acuerdo en decirle a Andy que hospitalice a su esposa en un hospital donde recibiría toda la atención necesaria, pero él no quiso.
Sin pensarlo demasiado, el hombre decidió que nunca, pero nunca, dejaría sola a su dulce mitad. Los dos cónyuges no se dejaron desanimar por una silla de ruedas y comenzaron a viajar juntos por el mundo. Antes de ese momento nunca habían viajado tanto y en un tercio de años, lograron visitar todos los continentes. En una entrevista el hombre confesó que amó a su esposa desde el primer momento que la vio y que no se puede imaginar pasar incluso un solo instante lejos de ella e hizo todo lo posible para que esto no suceda.
Lamentablemente ambos fallecieron, con pocos meses de diferencia: Andy en el 2019, mientras que Donna en el 2020. Pero de algo estamos seguros: han dejado una gran enseñanza a todas las personas que tendrán la suerte de conocer su historia.
Han sido un ejemplo de inspiración para encontrar la fuerza de seguir adelante incluso en los peores momentos de la vida. Ellos lo lograron y lo hicieron de la mano, no lo olvidemos.