Ve a una mujer obligada a sentarse en el suelo en la parada del autobús: construye un banco para ella
Muchas personas aman su barrio y a menudo se enfadan cuando hay un perjuicio o algo no funciona bien: esto de hecho despierta el deseo de intervenir concretamente, pero los compromisos y la rutina de la vida diaria llevan a renunciar a todos los buenos propósitos para concentrarse en nuestros problemas. Sin embargo, James Warren, un joven de Colorado, en los Estados Unidos, decidió trabajar para su barrio, en la ciudad de Denver, para mejorarlo sin pedir nada a cambio.
via Washingtonpost
El joven caminaba cerca de su zona cuando algo lo hizo reflexionar. "Una mujer estaba esperando el autobús, sentada en la calle embarrada, acababa de llover. Me dije a mí mismo que eso no era aceptable, entonces pensé en hacer algó más por mis conciudadanos", contó. Ese momento lo inspiró a brindar una ayuda concreta a su comunidad: "Inmediatamente pensé en hacer algo, por ejemplo pudiendo construir un banco".
Dado que su padre se ocupa de la construcción de casas y él creció con muchas herramientas, sabía que tenía las habilidades necesarias para construir un banco. Warren encontró el material necesario buscando y pidiendo en obras de construcción del barrio, que le permitieron recoger algunas pilas de madera desechada. Construyó un banco y lo puso en la parada del autobús donde semanas atrás había visto a la pobre mujer sentada en el suelo. Desde entonces construyó ocho personalizados y los colocó en las paradas de autobús de la zona.
Cada banco requiere algunas horas de trabajo y un aspecto diferente, dado que son trabajados con los desechos de la madera: "Dejé que la madera me hablara", explicó. Warren los entrega en mano a las paradas de autobús sin áreas para sentarse. "Aún no pregunté al Municipio si estoy autorizado...Hasta que no me detengan, seguiré haciéndolo creo", comentó. A pesar de que cada banco es único, James se asegura de grabar el mismo mensaje en todos: "Sean amables". "A veces es difícil cambiar el mundo que nos rodea, pero la verdad es que cualquier persona puede ser amable. Espero ser de inspiración para todos aquellos que quieren ser la mejor versión de uno mismo", dijo.
Aparentemente, la esperanza de James se cumplió, dado que también otros comenzaron a realizar bancos para las paradas de los medios públicos. "Fue realmente hermoso ver que otras personas hicieron lo mismo. Ya no se trata de un solo hombre que hace algo por su barrio, sino de hombres y mujeres de toda la comunidad que colaboran con mejorar el lugar en el que viven".
Un sano gesto de altruismo que mejoró los días de muchas personas y estamos seguros que también los de James. ¡Felicitaciones!
