Enfermera adopta al hijo de una madre soltera que falleció prematuramente: "se lo había prometido"
Incluso ante las mayores dificultades de la vida, el primer pensamiento de una madre está siempre dirigido al bienestar de sus hijos. Y así ha sido también para Tricia Somers. La mujer descubrió que sufre de un cáncer terminal y al ser una madre soltera de Wesley, un niño de tan solo ocho años, se aseguró de confiar a su pequeño a los brazos de una digna segunda madre capaz de hacerse cargo de él con su mismo amor. Todo nació casi por casualidad, en el hospital, mientras se sometía al tratamiento hace casi una década.
via CBS
Durante su tratamiento, Somers conoció a una mujer que llevaba su mismo nombre: la enfermera de oncología Tricia Seaman y para ella ha sido un verdadero amor a primera vista. "Antes de que me dijera algo, me sentí reconfortada. Era como si alguien me hubiera puesto encima una manta caliente", contó Somers a la prensa local hace ocho años. "Nunca sentí nada parecido hasta entonces, ni ningún otro vínculo con nadie más". La madre juró que conoció a un ángel.
Seaman comentó el encuentro afirmando que "Somers tenía tan solo 45 años. Entonces era natural para mi consolarla, hasta que un día me dijo: 'Tengo algo que preguntarte: ¿puedes cuidar a mi hijo? ¿Lo criarás si no logro sobrevivir?' Quedé muy sorprendida". Obviamente, la enfermera se sintió halagada por el hecho de que la madre hubiera confiado en ella para el cuidado de Wesley. Sin embargo, quería adoptar un acercamiento diplomático y asegurarse de que todas las personas involucradas se sintieran cómodas.
El destino quiso que Seaman y su familia tuvieran en mente alargar su familia de cuatro hijos con una adopción. De hecho, precisamente en esa época, habían apenas terminado los procedimientos para convertirse en padres de acogida. Habían sido también aprobados como padres adoptivos y habían completado el primer paso del proceso. Entonces, parecía que el universo estaba del lado de Somers, después de todo. Las dos mujeres eran extrañas entre sí, sin embargo Seaman, su esposo y su familia aceptaron. Comenzó todo paulatinamente: en primer lugar, Seaman acudió al departamento de Somers para conocer mejor a Wesley.
El paso siguiente fue invitar a Tricia y a Wesley a la casa de Seaman. Quería ver cómo se llevarían con su esposo y sus cuatro hijos. Además, ayudaría a Wesley a instalarse en su nueva habitación. La primera vez que Somers visitó la casa de Seaman, Tricia se aseguró de pedir su opinión. Quería saber si todo estaba bien y si estaba a la altura con sus estándares. Afortunadamente, Soomers no podía estar más que satisfecha con la casa y le dijo que todo parecía "perfecto". Seaman y Somers se hicieron mejores amigas y la mujer comenzó con el ciclo de quimioterapia. Las dos trabajaban juntas para organizarse mejor y firmar los documentos de adopción para convertir al señor y a la señora Seaman en tutores legales de Wesley. Somers falleció no mucho tiempo después. Desde entonces han pasado ocho años.
Wesley apenas ha cumplido 16 años y ahora tiene el permiso de conducir. Antes de que su madre fallezca, le compró regalos para que abra cuando sea más grande. El más reciente ha sido un llavero, para cuando tenga su primer auto. En pequeñas cosas como esta, la enfermera y paciente aún están criando al chico juntas. "Agradezco a mi madre todos los días por haberme regalado una segunda familia", comentó Wesley. Seaman además contó que Wesley es un estudiante ejemplar y un muy buen chico: "Es excepcional. Pero lo más importante es que tiene un corazón tan amable y amoroso", dijo Seaman.
