Repartidora entrega un paquete a una señora: cuando se da cuenta que está muy triste, se detiene a hablar con ella
Muchas personas son devotas a su religión, pero no siempre es fácil poner en práctica las enseñanzas de la propia fe. La compasión, la empatía, la sensibilidad son sentimientos extremadamente altruistas y se necesita un gran corazón para poder realizar de forma espontánea actos de bondad: sin embargo, cuando se logra hacerlos, nos sentimos más felices y satisffechos.
Sabe algo de esto Amanda Riggan, una repartidora que vivió una experiencia particular con una mujer a la que le debía entregar un simple paquete.
via CBN
Todo comenzó hace algunos años, cuando Amanda decidió compartir un video en el que contaba su particular día. En un día laboral como muchos, Amanda conoció a una mujer con la que entabló una conversación, explicándole que su esposo estaba muy enfermo. Teniendo que terminar el recorrido, Amanda asintió, sonrió, pero cerró rápidamente la charla para seguir trabajando.
En el camino de los repartos, sin embargo, una voz dentro de ella le decía que regrese con esa mujer triste: la sensación se había vuelto tan insistente que al final la joven regresó con la señora. "Sonó el timbre y ella bajó por las escaleras con las lágrimas en los ojos", contó Amanda. "Cuando vió que era yo sonrió y le dije: 'Señora, ¿puedo rezar con usted?' Salió al porche y me apretó muy fuerte. Recé por ella, por su familia y por su esposo".
Tres años después de ese video, Amanda quiso agradecer por la enorme repercusión mediática que tuvo su emocionante relato: "Tres años y 24 millones de visualizaciones después. Titulé este video 'Juego del cambio'. Nadie podía saber cuánto cambiaría mi vida a partir de ese día. Un acto de amabilidad que pensaba compartir solo con mi familia y los amigos, y sin embargo abrió los corazones de muchas personas".
Si lo pensamos bien, su gesto fue muy sencillo, pero dio esperanza y un poco de consuelo a una mujer necesitada. Quizás precisamente esto ha colaborado para que se convirtiera en un ejemplo para todos. Hacer el bien, dar una mano es importante tanto para quien recibe la ayuda como para quien decide ponerse en disposición para la otra persona.