Hermano y hermana son adoptados por familias distintas: después de 40 años se encuentran viviendo en la misma zona
La vida siempre tiene una extraña manera de llevarnos atrás en el tiempo, recordándonos constantemente de dónde venimos. Para Kitt Wakeley era inevitable volver a pensar en su infancia, a pesar de que pasaron muchos años, ya que él y su hermana se habían separado cuando aún eran niños y desde entonces ya no se volvieron a ver. Si bien vivieron juntos situaciones terribles durante la infancia y fueron transferidos de familia en familia, en adopción, su historia familiar se interrumpe cuando fueron adoptados por dos familias distintas. Kitt, sin embargo, no pudo encontrar nunca la paz y siguió pensando en su hermana. Hasta que un día le llegó una insólita solicitud de amistad en la página de Facebook.
via Youtube / KFOR Oklahoma's News 4
Kitt hoy es un hombre exitoso, que prácticamente tiene todo en la vida: una larga carrera musical, una esposa que lo apoya, hijos, una casa...en fin, ¿qué otra cosa podría desear un hombre de la vida? Sin embargo, para Kitt siempre hubo una cuestión no resuelta - un pedazo faltante de su vida que quería reconstruir. Quería encontrar a su hermanastra, Tasha, con quién había pasado los primeros años de su vida, intentando superar muchos momentos difíciles. Los dos fueron bruscamente separados una vez que ambos fueron adoptados por dos buenas familias. Kitt aún recuerda el sonido de las bolsas de las compras que rumoreaban mientras los adultos alrededor de él preparaban las cosas de Tasha y la llevaban fuera de la casa para que pudiera abrazar a su familia adoptiva. Kitt, aún hoy, odia ese sonido y no puede soportarlo: "Solo recuerdo que ella lloraba y yo lloraba y que luego la llevaron afuera de la puerta".
Si bien Kitt nunca dejó de pensar en Tasha y buscarla, nunca había logrado localizarla. Sin embargo, un día, recibió una nueva solicitud de amistad en Facebook, por parte de una mujer que decía que era su hermana.
Kitt no creyó de inmediato en las palabras de esa desconocida, pero en lugar de proponerle hacer el examen de ADN le pidió información que sólo su hermana podía conocer. La mujer, no hace falta decirlo, respondió correctamente y Kitt supo, entonces, que finalmente había encontrado a su hermana. O mejor aún: había sido ella quien lo había encontrado a él. Cuando Tasha vio la sonrisa de Kitt entre las fotos de Facebook tuvo la sensación de finalmente haber encontrado a su hermano y tenía razón. Después de 40 años nuevamente estaban en contacto. Lo más impactante es que los dos descubrieron que vivían a menos de 2 kilómetos de distancia del uno con el otro:
"No es posible que no hemos estado en el mismo negocio de alimentos, en la misma estación de servicio, en el mismo bar durante estos años. Hemos estado en el mismo lugar quién sabe cuántas veces y no teníamos idea".
Una historia increíble que nos recuerda lo importante que es no rendirse jamás en la vida.