Ve a una pareja a la que le rechazan la tarjeta de crédito y ofrece pagar por ellos: "¡Yo me encargo!"
A pesar de que el mundo parece que se pone cada día peor, hay muchas buenas personas que demuestran un altruismo y una generosidad que parecían haberse perdido desde ya hace un tiempo. Quizás a algunos les parezca extraño, sobre todo si se habla de dinero, pero existen personas que están dispuestas a ayudar a los demás, incluso a perfectos desconocidos, sin tener necesariamente que obtener algo a cambio. Es lo que le sucedió a una pareja de Texas, camino a una reunión familiar; la pareja se detuvo para comprar algunos regalos para sus hijos, pero su tarjeta de crédito fue rechazada más de una vez. Es aquí donde se revela una mujer "enviada por Dios".
Ben Hendley, un hombre que se encontraba en el lugar correcto en el momento correcto, logró presenciar la maravillosa escena que tuvo como protagonistas a dos cónyuges y a una mujer muy generosa. El hombre y su esposa se habían detenido en un Walmart de Canton, en Texas, para comprar algunos regalos para sus hijos, pero algo no salió como esperaban: en el momento de pagar, la tarjeta de crédito continuamente era rechazada. La mujer que se encontraba en la fila detrás de ellos, entonces, decidió inesperadamente pagar por ellos. La pareja inicialmente rechazó su amable oferta, tratando de llevar a cabo la transacción, pero también la tarjeta de crédito de la mujer del hombre era rechazada. La mujer entonces insistió: "¿Sabes algo? ¡Es Navidad! ¡Yo pagaré!".
La pareja siguió diciéndole que la suma no era poco dinero, sino 200 dólares, sin embargo Joyce Hargrave -este es el nombre de la benefactora- no quizo escuchar razones: "Silencio. No digan nada más. Yo me encargo. Te bendeciré como Dios lo hizo conmigo", diijo Joyce.
Joyce entonces pagó por los regalos de la pareja y Ben, el hombre que había asistido a la escena, se quedó tan conmovido por el altruismo de la mujer que la siguió al estacionamiento para felicitarla. Aquí notó la matrícula de su auto, en la que se leía "Enviada por Dios". Ben descubrió que Joyce trabajaba para una empresa con ese nombre y que era realmente una buena persona. Con el testimonio de Ben, la acción positiva de Joyce resonó en toda la web, donde cientos de usuarios felicitaron la bondad de la mujer.
En efecto, ¡personas como Joyce no se encuentran todos los días en el supermercado! ¡Felicitaciones!
