Se gradúa y se arrodilla ante los pies de su hermano: una manera para agradecerle por haber renunciado a los estudios por ella
Cuando alguien tiene un sueño en el cajón, es capaz de hacer todo lo necesario para cumplirlo, pero cuando el desafío es más grande de lo que se espera, se necesita tiempo y ayuda de las personas más cercanas, las cuales a veces están hasta incluso dispuestas a hacer un sacrificio importante con el único propósito de ver ese sueño cumplido.
Un ejemplo de este enorme gesto de amor gratuito es la historia de una joven graduada en Thailandia, que se hizo famosa en las redes sociales por haberse arrodillado ante los pies de su hermano durante la ceremonia de graduación para agradecerle por los sacrificios realizados por su educación.
via Says
videoTikTok - @chnitakotchasit
La joven Ying Chanita explicó que la madre es una talladora de caucho y no gana lo suficiente para mantener a su familia; entonces, hace unos 10 años, su hermano -llamado Nattapong Chanapol- decidió abandonar el segundo año escolar profesional para colaborar con el sustento. Después de abandonar los estudios, ayudó a la madre a recolectar y vender caucho.
Los dos aún viven junto con la madre en la provincia de Surat Thani, en el sur de Thailandia. Ying contó que en esa época, como estudiante de secundaria, no había entendido lo que había hecho su hermano, hoy de 30 años, pero en estos últimos años de universidad, la joven se dio cuenta de la enorme renuncia de Nattapong y decidió agradecerle efusivamente.
En un video que fue visualizado más de 10 millones de veces en TikTok se ve a la estudiante ponerle la túnica de graduación a su hermano en agradecimiento. Inmediatamente después, la joven se arrodilla ante su hermano y ante todos sus compañeros de la Universidad Suratthani Rajabhat.
"Mientras me quitaba la túnica para ponérsela a mi hermano, lo hacía con el corazón, deseando que también él tuviera su momento. Porque mi hermano no tuvo la posibilidad de estudiar y me regaló esta suerte a mí. Gracias a este chico que sacrificó todo por su hermanita", explicó Ying. Obviuamente Nattapong quedó emocionado por el gesto realizado por su hermana: "Cuando la vi con la túnica me emocioné. Estoy muy contento que haya podido graduarse. Su logro no me hizo estar arrepentido por el futuro al que he renunciado. Y quiero decirle a mi hermana menor que estoy muy orgulloso de ella y de la mujer en la que se ha convertido", comentó.
Entre familiares es normal darse una mano, pero renunciar al propio futuro a favor del de una hermana no es algo que harían todos, por lo cual queremos unirnos al coro de elogios recibidos por este joven y agradecerle por el ejemplo dado.
