Hermanastros se enamoran y se casan a pesar de los juicios negativos
Se dice que nada ni nadie es capaz de detener al amor. Un sentimiento irresistible, fuerte, único que logra arrastrar a cualquiera a una maravillosa vorágine de la cual es difícil salir. Cada uno está destinado a encontrar a su alma gemela y tarde o temprano, la encontrará a lo largo de su camino. Pero ¿si la situación no fuera la ideal y se crearan tensiones precisamente debido a los sentimientos entre dos personas?
Es la circunstancia en la cual se encontraron los dos protagonistas de esta historia. Lo que se interpuso en el camino del amor, en este caso, era el vínculo familiar que los unía.
via Daily Mail
Matilda y Samuli Eriksson de 23 y 27 años se conocieron cuando sus padres comenzaron una relación. Hermanastros y luego amigos, entre ellos siempre hubo un gran entendimiento y todo parecía estar muy tranquilo inicialmente, pero luego sucedió algo inesperado.
Con el paso de los días y de los meses, los jóvenes siguieron viéndose y las salidas juntos aumentaban cada vez más. Su amistad se intensificaba, pero ninguno de los dos aún sentía una carga "romántica". Sin embargo, en lo profundo, algo importante en ese sentido se estaba abriendo paso.
"Fue Samuli quien dio el primer paso -contó la joven- y yo debo admitir que mi respuesta fue muy positiva, pero inmediatamente nos dimos cuenta que no podía funcionar". Así decidieron tomar caminos distintos y no verse más, pero la separación tuvo poca vida. Lo que sentían el uno por el otro era demasiado fuerte y no podían evitar escucharlo.
"No sabía qué hacer -continuó Matilda- estaba dividida: por un lado lo amaba, pero por el otro sabía que no estaba bien y tenía miedo de lo que podían pensar los demás". Dudas que le hubieran surgido a cualquier persona, pero el corazón es el que manda y así fue también para ellos. Después de superar el obstáculo de la desconfianza de lo que sentían, decidieron dejarse llevar y vivir su amor.
Obviamente afrontaron el tema con sus padres y según lo que han dicho, fueron más comprensivos de lo que pensaban. Aceptaron la relación e inmediatamente se vieron felices por lo que estaba sucediendo. La serenidad con la cual fue recibida la noticia, les permitió a los dos jóvenes vivir su historia y decidir, después de un tiempo, casarse. La ceremonia tuvo lugar en Finlandia donde, rodeados del cariño de sus seres queridos, Matilda y Samuli se juraron amor eterno.
Una historia con final feliz que, a pesar de todo, recibió diferentes críticas. Muchos amigos y muchos usuarios que se enteraron de la historia tuvieron dudas sobre su vínculo. Pero ¿está bien criticar una elección similar y considerarla negativamente porque son hermanastros?
¿Tú qué piensas?