Emigra y trabaja como mujer de limpieza: hoy es millonaria gracias al éxito de su empresa
Hay sueños que parecen imposibles de alcanzar, pero que con mucha fuerza de voluntad y determinación son definitivamente alcanzables. En la vida se necesita también una pizca de suerte, es verdad, pero en la base debe haber una férrea disciplina que lleva a tener que hacer sacrificios, día a día, en vista de un futuro mejor. Mila Garro es seguramente una de esas personas que en la vida tuvo que enfrentarse a muchos problemas y dificultades, pero también es una de esas que, al final, logró abrir su camino comenzando desde cero. ¿Cómo? Se los contamos con detalles.
via ABC Reporter
Mila Garro emigró a los Estados Unidos desde Brasil cuando tenía tan solo 18 años y no sabía ni una palabra en inglés. A pesar del gran salto hacia el vacío, Mila sabía que Estados Unidos representaría su gran oportunidad y ya durante la primera visita en el país de adolescente le hizo comprender lo atraída que se veía por esa tierra. Para ellas las cosas no fueron fáciles desde el comienzo: abandonada por sus padres, creció con su abuela paterna, la cual la llevaba al mercado como pequeña ayudante. Es aquí donde Mila aprendió por primera vez a tener que lidiar con clientes y a desarrollar su lado emprendedor. Luego, a los 15 años, recibió como regalo de cumpleaños un viaje a los Estados Unidos y fue en esa ocasión que Mila se enamoró de este país, tanto que no quiso regresar más a Brasil: "Había encontrado mi lugar en el mundo y no quería irme, pero como todo adolescente debía terminar los estudios en Brasil, entonces regresé", recordó Mila.
Luego, regresó a los Estados Unidos para quedarse para siempre. En agosto del 2007, Mila se fue a Miami sola, sin hablar inglés y sin el apoyo de su familia. Afrontó sus primeros problemas en un país extranjero: se quedó encerrada en la habitación del hotel durante una semana, comiendo siempre lo mismo ya que no sabía cómo pedir comida diferente en inglés. "Hubo momentos de soledad, de reflexión y decisiones", admitió Mila, que sin embargo hoy sabe bien que tomó la mejor decisión. La joven se arremangó y comenzó a hacer trabajos de limpieza: llegó a limpiar 15 casas por día, con la intención de ahorrar algo de dinero.
Las cosas, luego, comenzaron a ir bien para la joven "extranjera": aprendió inglés y comenzó a tener cada vez más clientes, gracias también a su manera muy profesional de hacer las cosas, hasta que logró abrir una empresa de limpieza propia. Ya en el 2016 su empresa contaba con al menos 10 empleados, mientras que en el 2020 ganó su primer millón de dólares. Hoy Mila es una empresaria exitosa y la fuerza laboral de su empresa creció muchísimo, así como su clientela. La empresa se expandió también en Florida y Mila es muy activa en las redes sociales donde da consejos como gran emprendedora.
¡Qué decir, un verdadero ejemplo de cómo se puede llegar a lo más alto incluso comenzando desde cero!