Madre e hija duermen en el auto: policías deciden ayudarlas y hacen algo especial por la pequeña (+VIDEO)
Los policías son figuras autoritarias encargadas de aplicar la ley en el territorio y mantener seguros a los ciudadanos, pero no dejan de ser personas: hijos, hermanos, amigos y padres a menudo tendemos a no pensar en el hecho de que podrían ser individuos empáticos y amables como cualquier otra persona.
Un ejemplo de tanta humanidad viene desde California, Estados Unidos. Cuando el oficial de policía Pricer, de 38 años y su pareja Scott Marsh aparecieron para investigar sobre un informe de un vehículo sospechoso, no esperaban encontrarse con una niña de 11 años.
via Usa Today
Facebook - Huntington Beach Police Department
La pequeña vivía en un auto con su madre y parecía muy asustada: "Para una niña de 11 años, hablar con un policía puede ser vergonzoso, pero estaba tratando de romper el hielo y que se sienta cómoda conmigo", explicó Pricer. En ese momento, el oficial de policía tomó una tiza y comenzó a dibujar cuadrados del juego "rayuela" sobre la acera, pero la pequeña no conocía las reglas del juego. Entonces el policía decidió hacerle una demostración práctica.
Mientras Pricer entretenía a la pequeña, el oficial Marsh pensó en hablar con la madre de la jovencita cerca de su auto para saber si podían ayudarlas. Después de escuchar sus dificultades, el oficial se comunicó con un grupo de trabajo para personas sin hogar de su departamento para encontrar una solución inmediata de vivienda. Mientras tanto, Pricer usó el juego para abrir una línea de comunicación con la pequeña con total tranquilidad y si crear ningún asombro.
Facebook - Huntington Beach Police Department
El dulce juego fue grabado por las cámaras y compartido en Facebook por el Departamento de policía de Huntington Beach. En el video, se ve a Pricer que explica y demuestra las reglas del juego: "Ok, tus pies tocaron la línea, pero te dejo seguir porque es tu primera vez", afirma el policía en el video, que recaudó 1,7 millones de visualizaciones.
Gracias a la bondad y sensibilidad de estos dos policías, la niña y su madre tendrán la posibilidad de encontrar un alojamiento más adecuado que su auto y recordarán siempre la manera dulce con la que el hombre decidió regalar una sonrisa a la pequeña, a pesar del momento tan difícil por el que estaban pasando.
