Deciden celebrar su boda sin la presencia de niños: la familia se divide
Se discute mucho, ahora, sobre la presencia bienvenida o no de los niños en algunos lugares públicos como restaurantes u hoteles, pero también en algunos eventos importantes como, por ejemplo, una boda. El motivo principal es, claramente, el ruido que podría causar un número importante de niños en un día tan importante para los novios. Los protagonistas de esta historia, de hecho, tomaron la difícil decisión de pedir a los amigos y familiares que dejen en sus casas a sus hijos. Se trata de la voluntad de los novios y por lo tanto debería ser respetada, pero esta decisión ha suscitado polémicas y ha provocado hasta incluso rupturas dentro de sus familias.
via Newsweek
Jenny Marin y su actual esposo, José Salcedo, se casaron en el 2022 después de pasar más de dos años organizando la boda perfecta. Obviamente, la boda "perfecta" no existe, pero uno se esfuerza lo más que puede para que esto suceda. Y fue precisamente para ir en esa dirección que la pareja decidió prohibir la entrada de los más pequeños al evento: nada de niños en su boda.
"Queríamos que esta fuera una noche en la que todos puedan divertirse y festejar sin preocuparse por las responsabilidades", dijo la novia con la intención de explicar una decisión tan controvertida. Las críticas de los familiares con hijos, de hecho, no tardaron en llegar. Su decisión había sido organizada desde el comienzo dado que ambos habían calculado que si invitaban también a los niños, serían alrededor de 20 en total. Marin, sin embargo, no estaba entusiasmada con la idea de tener 20 posibles imprevistos en su día perfecto, aunque era consciente de la dificultad de comunicar esta decisión: "Tomar esta decisión no ha sido fácil porque tiende a ser desaprobada por todos o considerada descortés. Dentro de nuestra cultura latina, somos conocidos por las grandes reuniones familiares y por ser acogedores con todos", explicó la novia.
Algunos miembros de la familia, de hecho, se quedaron muy irritados por esta decisión, tanto que decidieron romper las relaciones y la comunicación con los novios:
"Tengo parientes que dejaron de hablarme debido a esta decisión. Los consideraba personas muy importantes en mi vida y los veía muy seguido ya que a mi familia le gusta organizar reuniones familiares. Ciertamente no me esperaba que me dejaran como lo hicieron, fue decepcionante".
A pesar de que el evento ya ocurrió, su familia sigue incluso luego de varios meses hablando y discutiendo de esta decisión tan controvertida. ¿Según ustedes es un buen motivo para tomar distancia de la familia?
