Niño de 8 años descubre que su amigo camarero tiene problemas e insiste en ayudarlo

Que los niños tengan un corazón enorme es un hecho. A menudo son ellos, con su espontaneidad, la serenidad y las ganas de vivir que tienen, quienes les dan grandes enseñanzas a los adultos. Sucede, por ejemplo, que se encariñan tanto con las personas que deciden, sin pensarlo demasiado, ponerse a su disposición para darles una mano si están en apuros.

Es exactamente lo que sucedió en la historia que estamos por contarles, en el centro del cual hay un niño de 8 años y su mejor amigo, un camarero del restaurante donde habitualmente iba con sus padres. Pero descubramos juntos la historia que emocionó a toda la web.

via The Western Journal

Gofundme

Todo sucedió en Little Rock, Arkansas, Estados Unidos, donde Kayzen Hunter, un niño de tan solo 8 años hizo algo increíble por su camarero preferido. El niño solía frecuentar con la familia un restaurante y aquí conoció a Devonte Gardner, que en muy poco tiempo se convertiría en su gran amigo, a pesar de la diferencia de edad.

El trabajador de 29 años habitualmente recibía al niño y a su familia siempre con una sonrisa y chocaba al niño los 5 que él siempre esperaba como el saludo habitual. Poco a poco, la relación con el camarero se convirtió cada vez más importante para el pequeño Kayzen, que pedía sentarse en mesas dónde sabía que encontraría y saludaría al trabajador.

Luego, un día, mientras estaba en el local con su abuelo, el camarero preguntó si sabían dónde podía encontrar un automóvil a un buen precio: todos los días debía caminar un largo trecho de camino para poder ir a su trabajo y estaba en una situación difícil. La casa en la que vivía con su esposa e hijas había tenido algunos problemas, se habían mudado a un hotel, pero los gastos eran tantos y no tenía grandes posibilidades para la compra de un medio de transporte nuevo.

El relato de su historia personal encendió una lamparita en la mente de Kayzen, tanto que decidió abrir una recaudación de fondos para su amigo. Victoria Hunter, la madre del niño, contó: "Es un joven con un gran corazón. Me decía repetitivamente que debíamos abrir esta recaudación de fondos para ayudar a Devonte y al final lo hicimos". 

La iniciativa tenía como objetivo la recaudación de 5.000 dólares para permitirle la compra del vehículo, pero, sin mínimamente presupuestarlo, se superaron los 100.000 dólares, una donación inesperada que cambió la vida del camarero. "Nos vimos obligados a dejar nuestra casa debido a las cucarachas y a la humedad que también era dañina para la salud de mis hijas -contó- Nos cambiamos de zona, tratando de ir a una que estuviera a nuestro alcance, pero las dificultades aún son muchas. El gesto de Kayzen me emocionó profundamente y nunca me esperé algo así" -dijo el trabajador.

Aparentemente, el hombre usó parte de lo recaudado para pagar la cuenta del motel, para finalmente alquilar una buena casa y también un auto para poder ir al trabajo cómodamente y moverse para cualquier mandado útil para su familia. "Lo que queda quiero dejarlo aparte -confesó Devonte- Quiero que mis hijas tengan una buena educación y que ya no tengan que vivir malas situaciones como la que acabamos de superar, tengo esperanzas de un futuro maravilloso para ellas".

Algo que podrá suceder no solamente gracias al esfuerzo paternal del camarero y de su esposa, sino también por mérito de un niño de tan solo 8 años y de su generosidad.

Vittoria Hunter/Facebook

Si reflexionamos bien, Kayzen no hizo nada tan llamativo: entendió que una persona estaba en dificultades y le dio una mano. Su altruismo jugó un rol muy importante y además fue posible también gracias al gran corazón de quien conoció la historia del trabajador y eligió hacer lo correcto.

El mundo es hermoso y puede serlo cada vez más, solo porque hay personas tan especiales viviendo en él, ¿están de acuerdo?