Joven está triste y llora por la pérdida de su padre: desconocida intenta consolarlo con un pequeño gesto
En la vida de todos los días se realizan muchos pequeños gestos que por lo general están ligados a nuestra rutina. A veces no nos damos cuenta de cómo una pequeña acción puede hacer realmente la diferencia para alguien. Estamos muy ocupados con nuestras vidas, con nuestros problemas, tanto que nos olvidamos que los demás pueden encontrarse en situaciones similares a las nuestras, o peores.
Esta emocionante historia es la prueba de que se necesita realmente poco para hacer sentir mejor a otra persona. Veamos qué fue lo que sucedió y a quién.
via Euro.eseuro
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El protagonista de esta historia es un joven hombre que se encontraba en el metro. El joven estaba visiblemente mal: lloraba a cántaros sacudido por sollozos que apenas lograba contener. Lamentablemente había fallecido su padre hace poco y el hombre estaba comprensiblemente muy dolorido. Una desconocida notó su profunda tristeza y decidió intentar hacer algo para levantarle el ánimo, entonces se acercó y le llevó algo: una barra de chocolate.
Pero no fue todo, junto a ese dulce presente, había una nota que decía las siguientes palabras: "te prometo que todo el dolor que sientes desaparecerá, llora y saca afuera todo lo que tienes dentro porque algo mejor llegará después. Ámate mucho".
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El joven quedó maravillosamente sorprendido por ese simple gesto y le agradeció a esa chica tan amable y considerada: también decidió intentar localizarla contando el episodio en Facebook con la esperanza de que su más sincero agradecimiento le llegara.
"Estaba llorando y me sentía como si estuviera por desmayarme del dolor que sentía, había perdido a mi padre hacía muy poco, pero de todas maneras tenía que ir al trabajo y por eso me encontraba en el metro. Esa joven fue tan empática conmigo, me hizo dar cuenta que la vida está llena de momentos bellos, tristes, felices, pero que siempre hay que seguir adelante porque todo pasa."
Una maravillosa historia que demuestra cómo podemos darnos fuerza unos a otros. Hacer el bien no requiere necesariamente de grandes esfuerzos, tratemos de tenerlo presente y emulemos a esa desconocida con el corazón de oro.
