Con 11 años abre su propio negocio y salva a su familia de la pobreza
En general, los padres son los primeros responsables del cuidado de sus hijos, garantizando sus necesidades y su bienestar: el amor y la dedicación hacia los hijos siguen siendo uno de los valores más importantes para la mayoría de las familias. Sin embargo, hay situaciones en que la vida tiene reservado misiones importantes incluso a los más jóvenes, como en el caso de Alison Avendaño, una niña colombiana de tan solo 11 años que con su extraordinaria inteligencia logró un hito muy importante: salvar a su familia de la pobreza.
A pesar de su edad y la situación de crisis económica en la que estaba su familia, fue ella quien encontró la solución gracias a su brillante instinto.
via Elpais
Desde pequeña Allison vivió en una familia acomodada, pero su curiosidad la llevó a descubrir el apasionante mundo del emprendimiento. Comenzó a vender productos artesanales, como pulseras de papel, usando las redes sociales para promocionarlas. Pero con tan solo 8 años, con ganas de probar algo nuevo, decidió preparar postres para las fiestas navideñas y venderlos a familiares y amigos. Fue en ese momento que los padres se dieron cuenta de la excepcional intuición empresarial de su hija. Sin embargo, un tiempo después, la familia tuvo que afrontar un momento de profunda crisis económia y su negocio se detuvo.
Para mantener a la familia a flote, los padres comenzaron a vender fruta y verdura por la calle, pero esto no fue suficiente para evitar la bancarrota. Sin embargo, la niña de 11 años, no se dio por vencida y decidió experimentar el marketing digital para salvar a su familia. Después de hacer unas búsquedas en internet, se dio cuenta que los negocios digitales son los que más crecen rápidamente y encontró el camino adecuado para llevar a su familia fuera de la crisis. "Intenté motivar a mi familia, sabiendo lo que estaba sucediendo, pero no perdí la esperanza. Encontré un modelo de negocio visionario y decidí seguirlo", contó.
Con sus nuevas habilidades, la pequeña se convirtió rápidamente en una consultora de empresas emergentes, ayudando a generar mayores ventas a través de las redes sociales. En pocos meses, recaudó más de 12.000 dólares para ayudar a sus padres.
Allison luego descubrió una nueva pasión y pretende seguir desarrollando sus habilidades en el campo del marketing digital, demostrando cómo la perseverancia y la determinación pueden llevar al cumplimiento de los sueños a pesar de la joven edad.