Niño de 10 años no logra encontrar una familia: pareja de docentes decide adoptarlo
Adoptar un niño con necesidades especiales es una experiencia que puede traer muchas emociones y satisfacciones: estos niños están en la búsqueda de amor, atención y cuidados pero adoptarlos significa ofrecerles todo esto y mucho más. No sólo se tiene la oportunidad de ayudar a un niño que necesita cariño y atenciones, sino que también se puede aprender mucho de ellos y apreciar la belleza de la singularidad de cada individuo.
Lo sabe bien Jenna Riccio, una maestra que en diciembre del 2018 conoció a un nuevo alumno llamado Nate, que la impresionó inmediatamente por su dulzura y su timidez. Nate se acababa de mudar a mitad de año a la clase de la escuela primaria Walsh de Waterbury, en Connecticut, donde era el único niño en una silla de ruedas.
Nate es un niño que sufre de anemia de células falciformes, una enfermedad genética que afecta a los glóbulos rojos del cuerpo. "Era muy tranquilo", explicó Jenna. "A veces lloraba sin motivo. Pienso que fue muy difícil para él la mudanza repentina. Tomó mucho tiempo para que lo acepten y para abrirse a todos". En ese momento, Jenna era la maestra de lectura en la escuela e hizo lo mejor que pudo para crear un ambiente acogedor e inclusivo para Nate y para los demás alumnos de la clase.
Nate tuvo que afrontar numerosas hospitalizaciones debido a su enfermedad durante su joven vida y en el 2019, cuando fue hospitalizado, Jenna fue a visitarlo. Luego, la maestra se enteró de que Nate había sido alejado de su familia biológica y colocado en un hogar de acogida en el Departamento estatal para la infancia y familias de Connecticut. Al sentir compasión por el niño, Jenna decidió visitarlo al hospital, ya que no tenía ninguna persona cerca que lo conociera. "Pensé que sería triste no tener a su familia allí con él. Entonces comencé a pensar en pedir su custodia para poder ser su madre", contó.
Jenna completó una extensa serie de cursos, seminarios y controles y en menos de dos semanas logró convertirse en la madre adoptiva de Nate. Hizo que expertos inspeccionaran su casa para asegurarse que estuviera segura para su nuevo hijo y completó todo el proceso en aproximadamente 10 días. Después de que Nate fuera dado de alta en el hospital, Jenna lo llevó a su casa con ella. Esto sucedió el 3 de octubre del 2019. Durante todo este tiempo, Jenna se enamoró de Tim Riccio, un docente en la escuela primaria Walsh que conocía a Nate por las clases de arte. La pareja se casó el 15 de mayo del 2021 y Nate asistió como portador de los anillos.
"Pasó por tantas cosas en sus 10 años de vida y hoy se despierta con una sonrisa en su rostro, preparado para afrontar el día", dijo Tim. "Es una inspiración para mi, para Jenna y para cada integrante de nuestra familia. Desde que enseño, conocí a muchos niños, pero Nate es epsecial. A pesar de haber vivido experiencias difíciles, nunca está de mal humor o triste. Al contrario, tiene un aura luminosa que ninguna dificultad puede oscurecer", agregó.
La historia de Nate demuestra la fuerza de la resilencia y de la positividad incluso en las circunstancias más difíciles.