Es criticada por su forma física: la madurez de la joven ha silenciado a todos
En el mundo de las redes sociales, compartir momentos felices no siempre se recibe con alegría y aprecio. A veces, nos podemos cruzar con comentarios ofensivos y crueles que pretenden herir y humillar a quienes se exponen. Es lo que le sucedió a Madison Haulter, una joven de 18 años que publicó sus fotos del baile de fin de año con su novio Tre Booker.
En lugar de recibir halagos y buenos deseos, Madison tuvo que sufrir las críticas de los body-shamers, que la insultaron por su aspecto físico. Pero veamos su historia con detalles y cómo reaccionó la joven frente a estas provocaciones.
via Today
Madison y Tre, ambos jóvenes de 18 años y alumnos del último año en la Pike High School de Indianápolis, Estados Unidos, estaban emocionados de compartir en Twitter sus hermosas fotos del baile de fin de año. Sin embargo, no se imaginaban recibir tantas críticas crueles. "Una joven escribió: "Qué hermoso que te ama aunque estés gorda, wow", seguida de otros usuarios que agregaron comentarios ofensivos sobre mi forma física", contó Madison. La joven vio los tweets solo después de haber transcurrido una velada divertida en el baile, pero se sintió herida por las palabras. Decidió no responder con enojo a los agresores.
"Estoy convencida de que no hay que responder al odio con odio. No le he dicho nada grosero y les pedí a mis amigos también que no intervengan", explicó. Madison demostró una madurez y una sabiduría que a muchos de nosotros nos falta incluso en la edad adulta: entendió que el único juicio que importa sobre sí misma es el suyo. "Lo importante es conocerse y amarse", dijo.
Finalmente, Madison escribió un tweet para cerrar el asunto. "No puedo entender cómo se puede ser tan grosero con personas que ni siquiera conocen", escribió.
También su novio respondió de la misma manera: "No eres gorda, pequeña: has venido a este mundo para mi. Eres perfecta, podría mirarte todo el día", escribió. Madison y Tre les enseñaron a todos una lección importante: la única forma para ganarle al odio es el amor, hacia uno mismo y con los demás.