Médico sigue ejerciendo a pesar de tener 102 años: "no quiero abandonar a mis pacientes"
Un dicho dice: "Elige el trabajo que amas y no trabajarás jamás, ni un sólo día de tu vida" y aparentemente es así y quizás es también uno de los secretos de la longevidad del doctor Christian Chenay, un médico familiar de Francia que ha dedicado toda su vida a su vocación: a pesar de haber llegado a los 102 años de edad, nunca ha dejado de tratar a sus pacientes, incluso en tiempos difíciles, y aún hoy sigue activo.
Christian piensa que sus pacientes no pueden prescindir de él, sobre todo en la zona francesa del Valle de Marne, que se lamenta de una baja presencia de asistencia sanitaria, dado que los médicos escasean.
via Le Figaro
"Tengo todavía 425 pacientes inscritos", dijo. "Es más un trabajo social que médico. Se trata sobre todo de burocracia", agregó. Muchas veces sus pacientes le piden que renueve sus recetas y el médico, que no desprecia la tecnología, comenzó a hacer consultas telemáticas. Estos esfuerzos son muy apreciados y dieron sus frutos. La larga carrera de Christian comenzó en 1946 en Bordeaux, cuando se convirtió en asistente de otorrinolaringología un año después de graduarse en medicina. El centenario recuerda que su decisión fue un poco obligada, pero se apasionó de la materia.
"Estaba en Angers y la única universidad era la de medicina. No tenía muchas opciones, pero luego te encariñas", cuenta. A lo largo de los años, el médico también fue docente en la Facultad de Medicina e investigador para algunos laboratorios estadounidenses, antes de establecerse en el Valle de Marne. Su trabajo sobre la hipertensión le ha valido el ingreso a American Who's Who, un diccionario que contiene las biografías de personajes ilustres.
Para homenajear a esta excepcional longevidad, a pesar de una caída que lo debilitó mucho, Christian fue premiado por el Consejo Departamental del Valle de Marne de la Orden de los Médicos.
Cuando le preguntan cuáles son los secretos de tal longevidad, el médico es algo impreciso: "Oh, no existen secretos. Siempre he comido poco en cada momento, haciendo casi siempre dos cosas al mismo tiempo". El anciano médico todavía es útil y apreciado por su comunidad, que lo considera un punto de referencia y un ejemplo.