Novia le pide al padre de la joven que le donó los órganos que la acompañe al altar
Expresar generosidad, solidaridad y amor con desconocidos es un acto maravilloso que muchas veces se expresa a través de la donación de órganos. Ese gesto ofrece esperanza a todos aquellos que sufren graves enfermedades, ofreciendo la posibilidad de curación y de vida a personas que habían completamente perdido la esperanza de un futuro.
La historia de Diana Donnarumma Kreher, joven mujer estadounidense, representa un ejemplo concreto de la necesidad y de la belleza de donar órganos. Su condición era un obstáculo para cumplir el sueño de casarse. El futuro y la posibilidad del matrimonio estaban en duda, ya que la lista de espera para el trasplante era extremadamente larga, pero luego algo cambió.
via Inspiremore
Diana Donnarumma vivió una emoción inolvidable cuando caminó hacia el altar con Daniel Donnelly Jr., el padre de su donante de órganos. Heather Donnelly falleció en un accidente automovilístico en Texas en el 2017, tres días antes de su boda. Los padres decidieron donar y fueron seleccionas de la lista de espera ocho personas, entre ellas Diana. A inicios del 2021, Diana quiso homenajear a Heather y le pidió a Daniel que la acompañe hasta la mitad del pasillo en el día de su boda. "Quería darle a su padre esta oportunidad, pero también llevar hacia adelante su espíritu al máximo todos los días", explicó Diana.
Daniel no pudo contener las lágrimas cuando vio a Diana con el vestido de novia y la abrazó antes de dejársela al padre, Glen, que la llevó hasta su futuro esposo, Conlan Kreher. La boda tuvo lugar en Salvatore's Italian Gardens en Lancaster y fue un sueño para Diana. "Sentí todas las emociones del mundo: estaba feliz, ansiosa, triste por Heather, pero inmensamente agradecida porque estaba por casarme con el amor de mi vida. Le dije a Dan que el espíritu de Heather estaba allí con nosotros y que estaba más feliz que nunca. Dijo que se sentía honrado en acompañarme hacia el altar y que ahora tiene otra hija. Quisiera que las personas entiendan el valor de la donación de órganos", contó.
Diana contó que sufrió problemas de salud desde niña y que descubrió en el 2016 que tenía gastroparesia, una enfermedad que le impide al estómago que funcione bien. Después de la donación se sintió mucho mejor: "Antes estaba cansada física y emocionalmente, pero ahora tengo un futuro", dijo. "Sin Heather nunca me hubiera casado", explicó.
"Estos chicos son cariñosos como lo era mi hija: estaría muy orgullosa de ellos dos -comentó Daniel- Les deseo buena suerta. Sé que Heather nos está mirando y la imagino muy feliz. Diana es una joven dulce, tiene un corazón de oro, me llama papá. Dice: 'Tengo dos padres ahora.' Me siento muy honrado". Una maravillosa forma de homenajear la vida y la herencia de Heather.