A esta mujer le pagan por dar a luz a bebés de personas conocidas en internet: "amo estar embarazada"
Ser madre es un regalo, una bendición. El hecho de que la unión de dos seres humanos pueda dar literalmente vida es algo extraordinario en lo que, quizás, no nos detenemos a reflexionar lo suficiente. Para nosotros es algo obvio, procrear, una familia. Desafortunadamente no todas las personas, por un motivo u otro, pueden tener hijos.
En tiempos cada vez más modernos, sin embargo, hay una solución también para esta gente en dificultad y la maternidad subrogada es un ejemplo de ello. Pero la protagonista de esta historia tiene una historia bastante particular: no es ella una mujer que no puede concebir, al contrario, ya tiene 2 hijos y le encanta el período de la maternidad y es precisamente por esto que decidió convertirse en una "donante".
via New York Post
Samantha Mathews, de 31 años, es una influencer, una creadora de contenido multimedia del Medio Oeste. Se ocupa principalmente de compartir trucos y particulares trabajos de remodelación para el hogar, da consejos sobre cómo aprender a que los niños vayan al baño, muestra las fotos de los viajes que hace con su adorable familia.
Está casada con Dan, de 34 años, con el cual tuvo dos hijos, un varón y una niña y está plenamente satisfecha con su familia.
No tiene la intención de expandir aún más su descendencia, sin embargo decidió incluir entre sus actividades laborales la de quedar embarazada y dar a luz a niños.
Samantha de hecho "presta" su cuerpo para que sean padres quienes no pueden tener hijos por cuenta propia. Lo hace detrás de una compensación, recibió unos 36.000 euros, pero dijo que fue atraída principalmente por la idea del placer de la maternidad que por el objetivo de lucrar: "me gustaba estar embarazada, fui afortunada en tener embarazos sin complicaciones y decidí emprender nuevamente esa experiencia".
La mujer primero se informó sobre todos los varios procedimientos relacionados tanto en la fecundación in vitro, como con las madres subrogadas y después de hablar mucho con su esposo, se anotó en algunos grupos de Facebook que tienen el objetivo de poner en comunicación a las parejas precisamente con las madres subrogadas.
Al final ella y Dan entraron en contacto y en plena empatía con una pareja de la historia emocionante y posteriormente a un largo proceso que incluyó visitas médicas psicofísicas, Samantha se sometió a una operación que le permitió comenzar un embarazo en nombre de "terceros". "No ha sido fácil: seguía repitiéndome mes tras mes, hasta durante el parto, 'este no es mi hijo, esto es por la pareja'".
Apenas nació el pequeño inmediatamente fue puesto entre los brazos de su futura madre no biológica para establecer rápidamente un profundo primer contacto.
Samantha no sabe si seguirá nuevamente con esa práctica y si "prestará" aún su vientra en un futuro ya que el embarazo sigue siendo un enorme gasto de energía física y sobre todo mental en estos particulares casos. Dice, sin embargo, que quedó muy satisfecha por la sensación que tuvo al ayudar a dar un hijo a quienes, de otra manera, no hubieran podido tener uno.
Luego del parto emprendió un viaje en caravana de 6 meses para recuperar emocionalmente a toda su familia, particularmente a sus hijos que de todas maneras entendieron que su madre estaba ayudando a otra pareja.
¿Ustedes qué piensan "de la aventura" emprendida por esta mujer?
