Está cansada de levantarse a todas horas para las comidas mientras su esposo duerme: le escribe una carta
Cuando en casa llega un hijo la vida diaria cambia completamente y salta cualquier tipo de hábito, motivo por el cual muchos padres pueden llegar a sentirse bajo presión y a percibir que las fuerzas escasean. Aquí, por lo tanto, hay momentos de relajación en los que se quisiera tan sólo alejarse de nuestro hogar y tomarse unos minutos para uno mismo en total libertad y soledad. No siempre es posible y hay que lidiar obviamente con las miles de responsabilidades del caso.
No sucede raramente que sean las madres específicamente quienes cuentan situaciones y necesidades similares y entre ellas encontramos a la protagonista de esta historia. Una mujer, una esposa y una madre que en una noche de insomnio como muchas otras y tomada por la desesperación por las atenciones que debía darle a su recién nacida, decidió escribir una particular y original carta.
via Daily Mail
En el centro de la historia encontramos a Caroline Olling Andersen, originaria de Dinamarca pero que desde hace tiempo vive en Dubai, la cual tuvo una hija pequeña a quien ama, pero que naturalmente es fuente de gran agotamiento. En un momento profundo de malestar y de presión excesiva, esta madre decidió escribir y dedicar a su hija una poesía titulada "Papá duerme".
"Amo a tu padre, realmente -comienza la composición- después de todo, sin padre, no te hubiera tenido. Pero desde la medianoche hasta el amanecer estamos solas y con el paso de las horas mi afecto hacia ti sufre algunos sobresaltos y se debilita un poco. Antes de ir a dormir, él y yo nos saludamos y nos decimos buenas noches, luego él se duerme y yo comienzo a despertarme".
Con estas palabras comienza un relato en el que muchas madres podrían verse identificadas y que es casi una petición para ser ayudadas y poder descansar de la misma manera que sus parejas. Una división de roles y de responsabilidades que, a veces, no sucede automáticamente, pero que es fundamental e importante. Ciertamente, hay parejas que deciden actuar de una cierta forma, pero esto no significa que uno u otro progenitor pueda tener momentos de deterioro tanto físico como mental.
La confesión de Caroline ha suscitado muchos comentarios y críticas hacia su esposo, razón por la cual ella quiso señalar que el hombre cumple su deber como padre y no es la persona que elude las responsabilidades. Simplemente cuando tuvieron a la pequeña y como ella tenía una larga licencia por maternidad, acordaron que los turnos de noche serían de ella, para que su pareja pudiera descansar para ir al trabajo al día siguiente.
Simplemente, según añadió, hubo una noche de colapso en la que se originó esta poesía que, sin embargo, termina con una confesión de profundo amor hacia su hija. Desde la seriedad del momento salió a la luz algo divertido que ha suscitado mucho interés, hizo sonreír y también reflexionar sobre un tema muy importante.
¿Tú qué piensas al respecto? ¿Te encuentras en esta poesía o carta como madre y como padre?
