El hijo autista quiere estudiar arte en la universidad: el padre se inscribe con él para no dejarlo solo
La relación entre padre e hijo puede ser única y especial y puede durar para toda la vida: la mayoría de los hijos, de hecho, se apoyan en sus padres para tener apoyo y estímulo, independientemente de la edad. Este vínculo inquebrantable se vuelve cada vez más fuerte a través de experiencias compartidas, como el deporte, pasatiempos o actividades cotidianas. Un buen padre logra transmitir su amor y sus valores pasando tiempo de calidad con su hijo y tratando de encaminarlo hacia sus pasiones constructivas.
via CBS
Ken Blahetka y su hijo Kevin comparten una relación muy similar a la que acabamos de describir, pero con un aspecto único. Kevin es un gran apasionado de la fotografía y le encanta capturar la belleza de los elementos naturales como las flores y los árboles, pero es autista y por eso tiene dificultades para adaptarse a las cosas nuevas. En vista al futuro universitario de su hijo, Ken tuvo una idea innovadora. Sabía que sería difícil para Kevin ir a los cursos de fotografía y de arte sin la ayuda individual necesaria.
Entonces Ken decidió ayudar a Kevin anotándose con él en la Joliet Junior College para ir a las clases juntos todos los jueves a la noche. Su aventura académica comenzó en el 2022 con un curso de cerámica: "Tenía que hacer los mismos deberes que debía hacer él. Mi tarjeta de estudiante está junto a la suya", contó Ken. Lloyd Wassenar, el instructor de arte, elogió el comportamiento de los demás alumnos con Kevin.
Contó que, al principio de su clase, había explicado la condición de Kevin y el hecho de que es autista para que los demás alumnos comprendan la situación del joven y crear una mayor solidaridad y comprensión en clase. Según Wassenar, su experiencia fue emocionante para todos. Podía ver el vínculo entre padre e hijo y cómo se apoyaban mutuamente.
El dúo padre-hijo también expuso sus trabajos en la galería de la escuela y tiene una competencia amistosa, con Kevin que bromeó sobre la calificación del padre: "¡Quizás lo está haciendo bien!".
Ken dijo que califica la experiencia de ir a clases con su hijo como "increíble" y que los motivó a seguir yendo a cursos de arte para los próximos años. También aconsejó a los padres de hijos con autismo que emprendan este viaje con sus hijos, porque vale la pena. "Seguiremos viendo a dónde nos llevarán estas aventuras", comentó Ken.
Su experiencia demuestra que con amor, paciencia y esfuerzo, se pueden superar los obstáculos y lograr grandes metas juntos.
