Regresa a su casa de un viaje de relax: cuando abre la valija encuentra una tarántula
Viajar es una de las experiencias más hermosas y enriquecedoras que podemos hacer en la vida. Cada vez que visitamos un lugar nuevo, descubrimos culturas, paisajes, sabores y personas diferentes. Un hermoso viaje nos abre la mente y el corazón, nos hace apreciar la diversidad y la belleza del mundo: cada meta es también una ocasión para traer a casa recuerdos, recuerdos tangibles de nuestras aventuras.
A veces, sin embargo, los recuerdos que quedarán grabados en nuestra memoria son los inesperados, los que encontramos casualmente o que nunca quisimos tener, como en la historia que estamos por contarles.
via Dailymail
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Después de dos semanas en las selvas de México entre Cancún y Tulum con su novia Emma Forrester, el joven James Mugridge tuvo un encuentro inesperado con un animal que se cree que es una tarántula roja mexicana de 12 centímetros de largo. Afortunadamente, estas arañas son dóciles y su picadura no representa un peligro para las personas. Sin embargo, cuando James vio las patas peludas salir de sus jeans, dejó escapar un grito de miedo, inconsciente de la naturaleza inofensiva de la tarántula.
Después de abrir el pliegue de los jeans con los palitos, James descubrió que la tarántula no había sobrevivido al vuelo de regreso. "Por un momento pensé que estaba viva y grité", confesó James. La pareja había visto varias tarántulas durante sus viajes a lo largo de la costa, pero ninguna de ellas había decidido hacer autostop en los jeans de James.
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El hombre confesó que el bolso con sus jeans iba a llevarlo en la cabina, pero no había espacio suficiente, entonces fue puesto en la bodega. "Pienso que la tarántula quedó en los pantalos durante al menos un par de días. Hemos tenido suerte porque estaba en la bodega, de lo contrario estaría viva y bien en la cabina", comentó James.
Aunque la mordedura de una tarántula es peor a la de una abeja, no es letal, pero James admitió que estaba aterrorizado por el inesperado encuentro con la criatura de ocho patas: "Era realmente lo último que me esperaba", dijo. Una desaventura que nos recuerda que siempre es mejor prepararse cuando se viaja en zonas selváticas: mejor no dar por sentado lo que puede esconderse en lugares inesperados.