Mujer vegana le escribe una carta a su vecino lamentándose del "olor" a carne que recibe
Durante nuestras vidas crecemos, maduramos y por lo tanto nos hacemos más conscientes de todo lo que nos rodea, se aprende a respetar al prójimo, a convivir y a tolerar algunos comportamientos que no nos gustan. O al menos así debería ser.
Unos vecinos, al no encontrar ningún compromiso, se vieron discutiendo animadamente y terminaron involucrando al pueblo de la web que se "dividió" en dos en un intento de apoyar a una familia u otra.
via Skynews
Sarah es una esposa y madre que vive en el suburbio norteño de Burns Beach. Se vio, desde su punto de vista, obligada a escribir una carta dirigida a sus vecinos que viven a su lado.
A la mujer de hecho le resultaba insoportable el olor a la carne cocinada que venía desde la ventana de los inquilinos contiguos: ella y toda su familia son veganos.
Entonces decidió escribirles amablemente, pero firme, que cierren la ventana mientras preparan esos alimentos que para ella son "prohibidos" y según dijo, "molestos". Detrás de la carta se puede leer: "Por favor tómate en serio el siguiente mensaje, es muy importante".
Jeff Hitchcock/Flickr - Not the actual photo
"Hola vecino, ¿podrías por favor cerrar la ventana que da a mi casa mientras cocinas? Te lo pido amablemente. Mi familia es vegana (sólo comemos comida de origen vegetal) y el olor a la carne que cocinas nos hace sentir mal y disgustados. Apreciamos mucho tu comprensión. Gracias. Sarah, Wayne y niños". Así dice el contenido original solicitado por la mujer que tanto revuelo causó.
Sí, porque a sus destinatarios y vecinos les pareció cuanto menos bizarra esa carta y no dudaron en publicarla en un famoso grupo de Facebook para citar "elementos extravagantes". Y aquí se desató una verdadera tormenta de polémicas.
Básicamente, el vegano consideraba legítima (y educada) la petición hecha por Sarah, mientras que la contraparte "carnívora", por así llamarla, encontró alucinante incluso sólo la idea de tal petición. El episodio rápidamente se degeneró y fue seguido por cartas cada vez más "insistentes": se llegó a hablar de intervenciones legales.
"Es vergonzoso todo esto"; "vete a vivir al medio del bosque si no toleras algo tan común como los olores de cocina de un vecino"; "yo prendería la barbacoa e invitaría a todo el vecindario". Estos entre los comentarios más "acalorados".
Hay quienes incluso coincidieron con la familia vegana afirmando que, para quienes siguen esa particular filosofía de vida, el olor a carne es realmente repugnante.
En definitiva, el debate que las cartas y las publicaciones han suscitado ha sido de todo menos constructivo y no hizo otra cosa que sembrar frustración. Quizás un compromiso entre las dos familias se podría haber alcanzado sin demasiadas renuncias por parte de ambas. ¿Ustedes qué piensan?