La madre tiene un ataque de pánico, la hija de 5 años la calma con un gesto sencillo (+VIDEO)
Ser padre significa, entre tantas cosas, saber transmitir y enseñar la empatía a tus hijos. Las emociones, la sensibilidad hacia ellos son fundamentales para criar individuos sanos y equilibrados. Las vicisitudes de la vida, algunos eventos particulares, pueden sacudir nuestra alma desde lo más profundo. Sin embargo, si sabemos cómo expresar nuestros sentimientos, si aprendemos a comunicarnos correctamente, tenemos siempre la posibilidad de recibir ayuda.
Una lección que esta madre logró transmitir muy bien a una de sus hijas: en el momento de necesidad la niña fue capaz de ayudarla emocionalmente. Pero veamos de qué manera.
via Opera.news
Kimberlee Bushman es la joven madre protagonista de esta emocionante historia. Todo sucedió de repente mientras estaba en el habitáculo de su auto: la mujer tuvo un ataque de pánico. No fueron claros los motivos que desencadenaron una reacción similar, pero el hecho es que la podemos ver filmada en un video donde aparece muy alterada y agitada.
La madre respira con dificultad, está comprobado y "herida emocionalmente". Sus dos hijos están allí con ella, uno está sentado en el asiento detrás del auto, mientras que la otra está al lado de ella, en el asiento del pasajero.
Hablamos de una niña de tan solo 5 años, de la que inicialmente podemos vislumbrar solo una manito que se pone adelante del rostro de la madre. Pero es gracias a esa mano abierta que la pequeña está por realizar un gesto increíble.
La ansiedad y aún peor el pánico, son formas de miedos fuertes que se apoderan de nuestra alma y mente. Traumas vividos y no todavía totalmente elaborados ocultos en lo más profundo dentro de nosotros, sin embargo siempre presentes. A veces no está ni siquiera claro cuál puede ser el factor desencadenante capaz de iniciar ese proceso de defensa tan abrumador, opresor. Pero hay técnicas que pueden ayudar en estos casos.
Y su hija de 5 años recordaba bien una: alargó su mano, estirando bien todos sus dedos, después que le pidió a su madre que finja que estas fueran velas y la invitó a "apagarlas" una por una. Cada vez que la madre soplaba sobre cada dedo de la pequeña, ella cerraba uno de sus dedos hacia la palma de su mano. El proceso fue repetido hasta que la niña se encontró con la mano "cerrada en un puño".
Este método original sirve para controlar la respiración y centrar la atención en quien se encuentra en pánico, soplando los dedos se exhala y luego se inhala y al mismo tiempo se "lleva la cuenta" de las velas que se apagan. El resultado es sorprendente: ¡la madre, visiblemente emocionada, se calma siguiendo las directivas de su hija que, al final, le pregunta si está bien y si necesita un abrazo!
La mujer obviamente abraza fuerte a su hija tan paciente y empática que supo captar su estado emocional y le encendió una enseñanzas que ella misma le había transmitido: la técnica de las velas. ¿Qué piensan de esta maravillosa historia?