Compra una langosta viva en la pescaderia...pero ninguno se esperaba el proximo paso
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Se llama Christine Louhead y decidio de compartir su pequeña mision en un emocionante video Paseando por un centro comercial se encontro con una solitaria langosta destinada a terminar en una cacerola con agua hirviendo. Subyugada por una fuerte emocion de piedad, decidio comprarla...Pero no por cierto para comerla! Ha pagado por ella un viaje de mas de 3000 km para hacerla regresar sana y salva a su habitat. Seguramente la pequeña se lo agradecera para siempre!
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